El equipo de Sabella recibió el aliento de los hinchas y quedó concentrado a la espera de la semi. “No somos un equipo, somos un país”, dijeron.
El seleccionado argentino de fútbol llegó a pura sonrisa a Sao Paulo y quedó concentrado a la espera de la semifinal del miércoles frente a Holanda, en el estadio Arena Corinthians.
El plantel albiceleste arribó pasadas las 12.30 al hotel Grand Mercure, en la zona del reconocido Parque Ibirapuera, donde fue recibido por casi un centenar de hinchas que alentaron con las canciones de siempre.
El ómnibus que traslada al equipo fue custodiado por un muy celoso operativo de seguridad montado por la Policía Militar, mientras efectivos del ejército habían cercado desde muy temprano el hotel.
El micro, con la leyenda “No somos un equipo, somos un país” paró frente al hotel y los jugadores fueron bajando de a uno y transitaron a paso lento los casi 30 metros que debían recorrer.
Antes del plantel y el cuerpo técnico, el primero en llegar fue el presidente de la AFA, Julio Grondona, quien arribó en un auto oficial de FIFA.
El equipo albiceleste hará un entrenamiento liviano en el Itaquerao, como conocen aquí al Arena Corinthians, en el habitual reconocimiento, a partir de las 18.30, mientras que a las 19.45 el entrenador Alejandro Sabella dará la conferencia de prensa.
Fuente: DyN