En esta oportunidad se trata de una mujer de poco más de 90 años de edad, quien vive en Carosini 120, a pocas cuadras del centro.
Siempre duele o conmueve, cuando se conocen casos de indigencia o abandono de niños o ancianos. Cuando estos salen a la luz, son numerosos los pedidos de intervención o ayuda, y esto es lo que sucedió esta semana en Concepción del Uruguay. En esta oportunidad se trata de una anciana de poco más de 90 años de edad, quien vive en Carosini 120, a pocas cuadras del centro de Concepción del Uruguay, en una casa que a simple vista está totalmente cerrada y acompañada desde hace varios años solo por decenas de gatos.
Se trata de Ofelia Vera, quien al parecer no tiene familiares en la ciudad y solo se conocería que habría unos sobrinos en Paraná. «Nos da mucha lástima como vive. Hay veces que sale a caminar con su bastón, pero no sabemos cómo subsiste, ya que tenemos entendido que una mujer pasa por la casa y sería quien le cobra su pensión. Una vez la vi llegar y cuando abrió la puerta, se le abalanzaron varios gatos que la hicieron caer. No sé si era por hambre o que se espantaron. Fue algo muy triste», dijo una vecina del barrio. A Ofelia la conocen todos y coinciden en señalar que la mujer está siempre sucia y con fuerte olor a gatos, el mismo olor que sale desde la casa y que se percibe desde la vereda.
«Sería importante que alguien de Bienestar Social viniera a verla y trataran de hacer algo por ella. Es inhumano que una anciana de tan avanzada edad viva en esas condiciones. Nadie merece estar de esa manera», manifestó otro vecino preocupado que agregó que hacía varios días que no se la veía. Según lo relatos, esta mujer tenía una hermana que vivía en la casa lindante, pero desde que ella falleció, siempre estuvo sola, tan solo acompañada por más de 40 felinos que circulan por el interior de la vivienda en forma constante. La situación reinante, llevó a que los vecinos del lugar, que enviaron una foto del interior de la casa, decidieran hacerlo público y que alguna autoridad se presente en el lugar para ver que está sucediendo y brindarle la asistencia necesaria.