Es porque la pista de aterrizaje en Paraná aguanta hasta cierto peso. Alerta por la abultada comitiva de Maduro.
Es porque la pista de aterrizaje en Paraná aguanta hasta cierto peso. Alerta por la abultada comitiva de Maduro.
Paraná.(RN).De Nicolás Maduro a José Pepe Mujica hay un largo trecho. Tan amplio como larga (o corta) puede resultar la pista de aterrizaje del aeropuerto Justo José de Urquiza, de Paraná, donde en un mes y medio más, ambos mandatarios estarán aterrizando sus aviones presidenciales, cuando arriben a una nueva Cumbre del Mercosur. La diferencia radica, esencialmente, en que uno, el venezolano, acostumbra a trasladarse en aviones de gran porte que alquila a Cubana de Aviación, con todo un despliegue de personal y seguridad adentro: auto blindado, armas, comitiva de hasta 150 personas y detalles similares. Y otro, el uruguayo, arriba en un pequeño avioncito, sin armas ni automóviles y con muy pocos acompañantes.
En el caso de la próxima Cumbre que tendrá lugar el 17 y 18 de diciembre, el avión de Maduro podría generar no pocos desafíos logísticos. Al peso de la máquina y el combustible debe sumarse la carga y personal, y podría ser que la pista de Paraná no soporte tanto. Encima, Fuerza Aérea traerá radares y aviones de combate para controlar el espacio aéreo en un amplio radio. Con sus 2.100 metros de largo, la pista del aeropuerto local es de categoría T4 y soporta hasta 111 toneladas. Por ello, desde la II Brigada Aérea se está exigiendo a las ocho casas presidenciales que participarían que operen con el avión más pequeño que les sea posible.
Pero el mayor problema a resolver lo plantea la capacidad de alojamiento turístico de la capital entrerriana, que no supera las seis mil camas y que podría ser insuficiente para un megaevento como la cumbre.
Según pudo averiguar Clarín, sólo en materia de fuerzas de seguridad, habrá cinco mil personas extras. Del 13 al 19 de diciembre, habrá tres mil efectivos de Policía entrerriana; 250 de Fuerzas Armadas, 500 de Policía Federal, otros tantos de Gendarmería y de Prefectura. Bomberos y Policía dispondrán de personal especializado en explosivos.
Además, la Policía entrerriana instalará a sus hombres en grandes campamentos. Luego, hay que contar a los funcionarios, secretarios y seguridad propia, entre otros, de cada una de las ocho comitivas que lleguen. “O 12 –agregó una fuente inobjetable consultada por Clarín-. Hoy jueves (por ayer) estuvieron en Paraná funcionarios de Prensa de Presidencia y del Canal oficial preparando detalles para su cobertura. Y hablaron de 12 mástiles para 12 banderas nacionales de los participantes”.
“Paraná no está preparada para un megaevento como éste”, aseguran algunas fuentes. Y citan como ejemplo el ancho de banda de Internet necesario para determinadas transmisiones. La hotelería local quedará saturada solo con la Cumbre. Los hoteles más lujosos deberán cerrar sus puertas desde cuatro días antes de la Cumbre y alojar sólo a las comitivas oficiales. Algunos de ellos requerirán adaptaciones edilicias o ampliar salones. Se derivará a alojamientos en Oro Verde, Crespo y otras localidades cercanas. Santa Fe no es opción: si se produjera una manifestación que corte el acceso al túnel subfluvial, las comitivas alojadas en la otra orilla del río Paraná quedarían aisladas.
La inversión necesaria para acondicionar la ciudad es “sideral”, según algunas fuentes, y la cubre presupuesto de la Nación. Remodelación de los alojamientos presidenciales. Adecuación de salones, tirar paredes, ampliar. Decorar. Colocar aires acondicionados, televisores, mejorar la iluminación. Hacer bacheo y arreglo de muchas calles por donde los jefes de Estado transitarán esos días. Instalar luminarias viales especiales, remodelar la Vieja Usina donde se instalará el comando unificado de operaciones y seguridad, así como el salón para la cena de gala.
También, realizar un censo de residentes de la zona de exclusión que quedará cercada y cerrada al paso general y que, según cálculos oficiales, alberga a unas 30 mil personas, entre propios y trabajadores que van y vienen. Todos ellos recibirán una tarjeta identificatoria digital preparadas por la Policía Científica, que deberán presentar al entrar y salir de dicha zona. Para urgencias sanitarias, se contará con ambulancias y helicópteros, por lo cual, también se están adaptando helipuertos y zonas de posible aterrizaje.
Por el momento, ninguna alerta de seguridad se ha disparado. No ha habido amenazas y tan sólo se habla de posibles manifestaciones de gremios y de ambientalistas. El 12 de noviembre habrá una reunión de coordinación y recién allí se sabrá, por ejemplo, cuántos integrantes tendrá la comitiva de Maduro. O de Dilma Russef, que es, después de su colega venezolano, la que mayores requerimientos tiene para su traslado.
Verónica Toller para Clarín
(RecintoNet)
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