«La investigación estaba encaminada y sabíamos que no se trataba de ningún ajuste de cuentas, ni de ningún mensaje mafioso», aseguró Jurajuría. También se refirió a la presunta participación de cómplices.
Matías Gabriel Ramón Rodríguez, de 20 años, y Alan Joel Ávalos, alias Chino, de 22, permanecen detenidos acusados por el crimen de Marcelo Cabeza, el chofer estatal cuyo cuerpo fuera hallado calcinado en el interior de un auto quemado en Paraná. Para el director de Investigaciones de la Policía de Entre Ríos, Fabio Jurajuría, con la detención de los dos sospechosos, «el crimen está aclarado».
«Desde que nos hicimos cargo de la investigación, luego de la aparición del vehículo incendiado y las manos, después, empezamos a indagar… con la patente del auto llegamos hasta la titular, quien manifestó que su hermano había salido y todo hacía presumir que era él; así empezamos a indagar dónde trabajaba, a sus compañeros, conocidos y familiares», explicó a el comisario al ratificar que, para los investigadores, «nada llevaba a que podía ser una venganza o algo similar».
Y en ese sentido, caracterizó a Cabeza como «una persona correcta, sin antecedentes personales, nunca estuvo involucrado en un hecho delictivo». Al remarcar que «fue colaborador en su trabajo durante la pandemia», Jurajuría insistió que, durante los primeros pasos de la investigación, «nada hacía presumir que podía tratarse de una venganza o de un mensaje mafioso». «Y la investigación nos dio la razón cuando llegamos a detener a estas dos personas», recalcó.
«La investigación estaba encaminada y sabíamos que no se trataba de ningún ajuste de cuentas, ni de ningún mensaje mafioso» Punto aparte, el titular de Investigaciones explicó que aún se desconoce el móvil del crimen; «Si fue un problema personal que tuvo con estas dos personas que llegaron a cometer este hecho». «No sabemos lo que realmente pasó en el interior de esa vivienda», acotó al respecto.
«La familia aportó publicaciones de redes sociales en las que Cabeza se hallaba en compañía de dos masculinos que eran totalmente desconocidos para la familia. Así se logró identificarlos, el domicilio de estas dos personas, y se reconstruyó el trayecto del vehículo desde la salida de la casa, por dónde anduvo; también se entrevistó a vecinos que vieron el auto el día del hecho», detalló Jurajuría en relación a los procedimientos que realizaron los pesquisas.
«El juez de Garantías, Dr. Mayer, a pedido de la fiscal, otorgó las ordenes de allanamientos, en lo que se hallaron abundantes pruebas que lo convencieron para ordenar la detención y tras la audiencia (de este sábado), dispuso 45 días de prisión preventiva» para Rodríguez y Ávalos.
El comisario comentó que, en los allanamientos a las viviendas de los sospechosos, «se hallaron elementos que serán sometidos a reconocimiento por parte de la familia». Consultado a Jurajuría si se investiga la supuesta participación de cómplices en el crimen, éste acotó: «Seguimos trabajando. No descartamos que puede haber otras personas relacionadas con este hecho».