Al hombre de Villaguay lo detuvieron en Santa Fe. Lo acusaban por llevar materia prima de cocaína, pero lo sentenciaron por contrabando del vegetal.
Un camionero entrerriano fue condenado por llevar 38 kilos de hojas de coca para masticar. Al hombre de Villaguay lo detuvieron en Santa Fe en abril del año pasado, acusado de llevar materia prima de cocaína, pero lo sentenciaron por contrabando del vegetal. Según se supo, aceptó en un juicio abreviado seis meses de prisión condicional. “Compré las hojas en Salta para consumir o darles a otros camioneros. Acá en la zona de Santa Fe y Entre Ríos es difícil de conseguir”, dijo J.G.M., un camionero de la ciudad de Entre Ríos, que fue detenido en la provincia de Santa Fe cuando trasladaba numerosas bolsas con hojas de coca. Al hombre lo acusaron por transportar materia prima para producir estupefacientes, pero ahora fue condenado por encubrir el contrabando de la mercadería, ya que la Justicia determinó que efectivamente llevaba el vegetal para “el coqueo”. El camionero cayó el 23 de abril de 2018 durante un procedimiento de control vehicular de Gendarmería en la ruta provincial N° 4, a la altura de la localidad de La Pelada, provincia de Santa Fe. El camión provenía de Las Lajitas, provincia de Salta. Al momento de proceder a la fiscalización de la carga, advirtieron a simple vista, en la caja de chasis del vehículo, la presencia de tres bolsas de nailon que emanaban un fuerte olor similar al de las hojas de coca. Constataron que había 160 paquetes de forma rectangular que contenían dicho material. J.G.M. fue procesado por el delito de transporte de materia prima para producir estupefacientes. El informe técnico elaborado por personal especializado del Laboratorio Químico de la Policía de Investigaciones de Santa Fe concluyó que las hojas contenidas en los envoltorios incautados pertenecen a la especie erytroxylum coca, con un peso total de 38,625 kilogramos. Aunque el pesaje sugiere una gran cantidad y apuntaría la sospecha de que podría haber tenido el destino de transformarse en cocaína, la pericia arrojó que podrían obtenerse solo 0,19 kilogramos de aquella sustancia. Por otro lado, según surgió del informe elaborado por la Aduana, la posesión de esa cantidad de hojas de coca constituye una infracción de tenencia en plaza de mercadería extranjera (ya que la misma se cultiva en el exterior), con fines comerciales sin justificar el ingreso, atento a que dicha cantidad supera la considerada compatible con un uso o consumo personal. A su vez, se realizó el aforo correspondiente, el cual determinó que el valor en plaza de la mercadería incautada asciende a la suma de 77.166,60 pesos. El acuerdo de juicio abreviado entre la Fiscalía Federal y el imputado fue presentado al Tribunal Oral Federal de Santa Fe, presidido por José María Escobar Cello. En la sentencia, el juez sostuvo: “Encuentro verosímiles sus manifestaciones (del camionero) acerca de que había comprado las hojas de coca para su propio consumo y para venderlas a otros camioneros para el coqueo, ya que la forma en que estaban acondicionadas –en pequeños paquetes– es la usada habitualmente para la venta en el norte de nuestro país, donde su oferta es absolutamente abierta y masiva, incluso promocionada mediante cartelería en la vía pública. Asimismo, es importante poner de relieve que el coqueo es una costumbre utilizada por los camioneros mientras realizan sus viajes, ya que es sabido que mitiga el cansancio y el hambre”.
Además, sostuvo que “está probado que en su estado natural las hojas de coca no producen dependencia física o psíquica, por lo tanto, no califican como ‘estupefacientes’. Su falta de nocividad no pone en riesgo el bien jurídico tutelado por la Ley Nº 23.737 de salud pública”. Sin embargo, el chofer fue igualmente condenado a medio año de prisión condicional.