Es el mayor monto aprobado, 230 millones de pesos. Sosa afirmó en su alocución que el gobernador “dio un fuerte respaldo a esta iniciativa para que recibiera un rápido tratamiento y aprobación tal cual hace este cuerpo”. Hubo fuertes críticas desde la oposición.
Es el mayor monto aprobado, 230 millones de pesos. Sosa afirmó en su alocución que el gobernador “dio un fuerte respaldo a esta iniciativa para que recibiera un rápido tratamiento y aprobación tal cual hace este cuerpo”. Hubo fuertes críticas desde la oposición.
Paraná.(RN). La mayoría oficialista en el Concejo Deliberante de Paraná se unificó hoy y aprobó sobre tablas la ordenanza por la que el Ejecutivo municipal solicitó la ampliación presupuestaria por 230 millones de pesos. Se trata de la tercera modificación que, en seis meses, sufre el Presupuesto Municipal en curso, y la mayor de todas en cuanto al monto. La anterior se trató de 77 millones de pesos, que, según argumentó el Ejecutivo en ese momento, iba a ser destinado a abonar sueldos. Esta última ampliación se aprobó sobre tablas, sin haber pasado por la Comisión de Hacienda para ser analizada. Según reveló Cristina Sosa (FpV) en su alocución, “el gobernador Sergio Urribarri dio un fuerte respaldo a esta iniciativa para que recibiera un rápido tratamiento y aprobación tal cual hace este cuerpo”.
Las únicas críticas llegaron desde el PS y la UCR, ediles que conforman el Bloque Frente Amplio – UNEN. “La actual gestión y su equipo económico tienen una sistemática mecánica tramposa de subestimar ingresos en el presupuesto para que a medida aparezcan nuevos recursos, mediante ardides contables puedan imputarlos discrecionalmente. Este proyecto que se va a tratar en la sesión de hoy no escapa a esa lógica, pero en este caso tiene un grosero incremento de 230.000.000”, advirtió Marcelo Haddad, que apuntó que será destinado “para maquinarias que llegarán tarde, obras que no se concretarán y para gastos discrecionales que podrá manejar a su antojo”.
“Tenemos conocimiento que se le ha pedido al bloque oficialista tratar sobre tablas este complejo tema, lo que es la muestra más cabal que al régimen que gobierna Paraná no le interesa para nada la transparencia y si el plenario del Concejo. avanza en este tema sin analizar los números y aprueba ligeramente semejante incremento presupuestario con una mayoría automática de todo el peronismo unido, impidiéndole a la ciudadanía analizarlo con seriedad, estaría atentando contra la división de poderes y avasallando cualquier posibilidad de control sobre la utilización de los dineros públicos; con el agravante que en uno de sus artículos le devolvería los superpoderes que, en el mes de noviembre de 2013, se le habían quitado a Blanca Osuna para disponer discrecionalmente de los dineros de los paranaenses”, alertó luego, tras lo cual desmenuzó los ítems que planteaba la ampliación solicitada por el Ejecutivo.
Y adelantó: “Esto no se terminará acá, todavía faltan cerca de 107 millones de pesos que van a ir apareciendo desde ahora hasta fin de año, en las sucesivas modificaciones presupuestarias que esta gestión va a realizar de acuerdo a la necesidad de caja que tenga en el segundo semestre del año”.
Al tomar la palabra, Sosa se presentó como miembro informante de la Comisión de Hacienda para argumentar el texto de ordenanza, pese a que no pasó por ese espacio de debate. Y justificó: “Entendemos que este proyecto debe ser aprobado prontamente, por responder a una clara justificación de sus razones y a una inédita inversión en equipamiento para la mejora en la prestación de servicios y a la ejecución de importantes obras para nuestra ciudad, con financiamiento genuino”. En ese punto, la edila ultraoficialista aseguró: “Pocas veces uno ha tenido la posibilidad de aprobar proyectos tan importantes y estratégicos para la calidad de vida de nuestros ciudadanos como el que hoy tenemos entre manos. Tal es la envergadura del mismo, que la intendenta Blanca Osuna ha considerado oportuno y conveniente presentarlo al gobernador de la provincia, Sergio Urribarri, del cual recibiera un fuerte respaldo a esta iniciativa para que recibiera un rápido tratamiento y aprobación, tal cual fuera remitido a este cuerpo”. De esta forma, el solanismo también acompañó el texto. Por este espacio interno habló Gustavo Guzmán, quien apeló: “A la corrección magnética que empiece a hacer la intendenta desde este momento hasta que finalice la gestión, para que ese norte inclaudicable sea el verdadero y no un norte ficticio”.
Luego Miguel Rettore (UCRY) también cargó contra el proyecto y el modo en que se iba a aprobar, por considerar que se hace “en la penumbra y la mayor oscurantez, sobre tablas y casi sin concomimiento y sin discusión”. Y aseguró que “hay un blindaje en el peronismo” sobre el gobierno municipal. “Esto evidencia un blindaje total que ha decisivo el gobernador sobre este gobierno, y lo decidió seguramente la semana pasada cuando en Paraná se dio una reunión por la inundación que se viene. Ahí dio instrucciones a los dirigentes de esta ciudad y todos, con el partido incluido, realizaron el blindaje; seguramente alguno con mayor o menor gana”, soltó Rettore, y marcó que esa situación hace a algunos concejales: “Desdecirse de lo que dijimos en noviembre del año pasado y volverle a entregar los superpoderes a este gobierno, que en otras circunstancias diría que es indignante para aquellos que así lo hacen, aunque políticamente lo comprendo, pero no los justifico”.
A esta acusación respondió el presidente del bloque oficialista, Juan Manuel Huss, quien instó a los concejales «evitar algunos ataques o intromisión en la vida partidaria de cada uno de los cuerpos», y añadió: “Solo quiero remarcar que atacar, o que uno de los argumentos para no aprobar este proyecto de ordenanza -que creemos trae beneficio para la ciudad- es que este bloque se ha unido y que vota un proyecto, le queremos decir que en la historia del movimiento nacional justicialista ninguna autoridad elegida democráticamente por el pueblo se ha tenido que ir antes, porque siempre ha tenido un partido fuerte que lo ha apoyado”.
Finalmente, Rosana Núñez (FpV) instó a los ediles de la oposición que participen de las reuniones de comisión “si quieren que los proyectos se traten, para que el autor exponga”, y aseguró que hay “muchos proyectos del oficialismo que también esperan en comisión”. Rettore ratificó: “Es una decisión política de estos concejales no asistir a las reuniones hasta tanto en las comisiones se traten todos los proyectos, en la medida que van derivándose porque entendemos que el presidente no tiene facultades para elegir qué proyectos se van a tratar. Paren con la chicana y la cantinela”. (RecintoNet)