Este jueves inició la inoculación en aquellas personas que son dializadas y que comprenden uno de los grupos de mayor riesgo. Posteriormente se continuará con aquellas correspondientes a instituciones privadas, y luego con las trasplantadas.
En el marco del Plan Rector de Vacunación contra el Covid-19 implementado en la provincia, este jueves comenzó la aplicación de la vacuna en pacientes dializados. En principio, el operativo se realizó en el hospital San Martín de Paraná con 27 personas de este grupo priorizado.
Es preciso indicar que estos pacientes están nominalizados y, por las características de su tratamiento, se encuentran nucleados en un número reducido de instituciones (ya sean públicas o privadas), lo cual posibilita avanzar y resolver rápidamente la vacunación. Actualmente, hay más de 1.500 personas dentro de esta población objetivo, y se tiene previsto que todos los pacientes renales de la provincia reciban la vacuna.
En consecuencia, se comenzó con quienes son tratados en el sector público, por lo que hoy en horas de la mañana se desplegó la estrategia en el San Martín. Allí se aprovechó la oportunidad de que los pacientes tenían su turno de diálisis para luego colocarles la vacuna Sputnik V.
Al respecto, el jefe del Servicio de Nefrología del nosocomio, Sergio Mendoza, indicó que el operativo se desarrolló hoy y continuará mañana. De esta manera fueron citados en dos grupos. Al mismo tiempo, indicó: “Del total de personas a vacunar, 26 son de Paraná y una es de la localidad de Hasenkamp, y para todos los casos se pone a disposición la ambulancia del nosocomio para el traslado”.
En tanto que en el hospital Justo José de Urquiza de Concepción del Uruguay está previsto vacunar a personas en diálisis entre mañana y la próxima semana. Se trata de un total de 109 pacientes, a los cuales en caso de tener menos de 60 años se les colocará la Sinopharm, mientras que si son adultos mayores recibirán la Sputnik V.
En virtud de avanzar con esta población, posteriormente se dará continuidad con los pacientes correspondientes a instituciones privadas, y se culminaría con los trasplantados. Este orden va de acuerdo a la factibilidad: el ámbito público se prevé que sea muy dinámico ya que los establecimientos donde se realizan los tratamientos cuentan con vacunatorios.
Para que cada paciente de este grupo de riesgo sea inoculado se requiere, además de la voluntad de recibir la vacuna, un profesional que avale con certificado la vacunación.
Cabe señalar que los pacientes con enfermedad renal crónica, en sus distintos estadios, son un colectivo de riesgo ante el Coronavirus, ya que pueden presentar cuadros graves si se contrae el virus. Es por ello que estas personas, especialmente las que se encuentran en tratamiento sustitutivo renal (diálisis) son consideradas un grupo prioritario para recibir la vacuna.