Desde marzo se implementa en el nosocomio local esta novedad que se utiliza actualmente en los principales centros quirúrgicos del mundo. El programa consiste en la realización de cirugías de mediana complejidad con un período de internación de menos de 12 horas desde que el paciente ingresa hasta que se le otorga el alta.
En el mismo se incluyen procedimientos como colecistectomías laparoscópicas, patología de la pared abdominal, hernias, y patologías como hemorroides y fístulas. Los pacientes sometidos a estos procedimientos ingresan por la mañana para cirugía y por la tarde, de no mediar complicaciones, obtienen el alta.
Esto implica una mejora en la recuperación del paciente, dado que el posoperatorio, lo realiza en su domicilio. Los pacientes son estrictamente seleccionados para estas modalidades. Cirugías de estas características son posibles gracias al perfeccionamiento de las técnicas quirúrgicas, anestésicas y cuidados de enfermería, tanto en el área quirúrgica como en sala de internación.
La nueva metodología representa un gran avance a nivel del hospital público, dado que posibilita el acceso a una mayor cantidad de pacientes a cirugías y que la ocupación de camas sea constante. Desde el comienzo de este programa en el hospital Urquiza se han llevado a cabo 62 cirugías con esta modalidad sin complicaciones o reingresos hasta el momento.