En el taller de los hermanos Bonelli, se trabaja sin descanso con miras a la última fecha del calendario del turismo carretera, que se llevará a cabo el próximo domingo en el autódromo de la ciudad de San Nicolás. Una fecha especial para los pilotos locales, ya que por primera vez logran entrar con uno de sus autos a la Copa de Oro y competir de igual a igual ante las grandes estructuras del automovilismo argentino. Al respecto Nicolás Bonelli hizo declaraciones y reflexiones de este 2018 “es un sueño cumplido el poder estar en la Copa de Oro, hace dos o tres años que estábamos ahí siempre peleando por entrar, y esta vez se dio. Ayer observaba en el taller a los mecánicos pintando el espoiler delantero y los espejos de color dorado como indica el reglamento para los pilotos que integran la copa, y la verdad que no lo podía creer; es como decir llegamos!!. Pero más allá de las chances matemáticas para pelear por el título, lo cual sabemos que es muy difícil por los resultados que se deberían dar, nosotros trabajamos sin descanso, para dar lo mejor de sí y retribuirle a nuestros sponsor un buen resultado”. Por otro parte, Pope instalado en la sala de motores mientras chequeaba algunos elementos de un motor nos contaba, “Nos vinimos muy contentos de San Juan, primero por la clasificación de Nico a la Copa, es algo que siempre nos trazamos como objetivo en cada año. Por otro lado en lo personal contento porque el chevrolet dio un salto en esta carrera, se corrigieron algunas cosas que dieron resultado así que en la previa a la última fecha estamos trabajando muy motivados. Esperemos en San Nicolas tener los dos un buen resultado, fue un año duro, complicado en varios aspectos, pero vamos a salir adelante. Les estoy muy agradecido a nuestros sponsor, por el esfuerzo que hicieron este año.”