Carlos Benavídez, un capitán adentro y afuera de la cancha

p12 12-2-El referente de los sureños asegura que le pesa la diferencia física por la edad, pero hace la diferencia con su experiencia. A los 38 años es el mejor triplero del Torneo Federal y sigue cerrando partidos en base a su efectividad. Carlos Benavídez con 38 años, disfruta de este presente en Parque Sur jugando en el Torneo Federal de básquetbol. Es el referente, capitán

y símbolo de los sureños, el mejor triplero de a temporada con el 55.7 % de efectividad y analiza el presente del equipo luego de un importante triunfo ante Sportsmen de Rosario por una importante diferencia. «Es un triunfo muy importante, era necesario. Cuando arrancamos la segunda etapa tuvimos tres derrotas seguidas, los dos primeros partidos se nos escaparon ahí nomás (por dos ante Unión de Sunchales y por uno ante Peñarol en Rosario del Tala) y por eso estábamos necesitados de ganar. Por suerte ganamos estos tres partidos consecutivos de local, demostramos que tenemos una localía fuerte, que es complicado venir a jugar a acá y gracias a dios las cosas nos están saliendo bien», destaca el jugador más experimentado del equipo.

 

Benavídez es sin dudas un referente del básquetbol uruguayense, dedicado siempre a esta actividad e incluso vistiendo diferentes camisetas, pero con esta primera oportunidad en un torneo como el Federal. «Más allá de que los viajes son cansadores y uno comparte diferentes momentos con los chicos como dormir en distintos lugares, que nos den de comer en otras ciudades, es algo que nunca había vivido, de ser profesional. Así que lo estoy disfrutando y agradecido al club que me haya apoyado para estar en el plantel. La verdad es que no tengo tanto protagonismo, por ahí los demás chicos son los que toman las riendas del equipo. Trato de aportar en defensa y en ataque cuando me toca tirar, pero por ahí no lo tomo como una responsabilidad ser protagonista en ofensiva. Para eso tenemos compañeros que lo hacen muy bien.Hay partidos que tomo más determinaciones porque el juego en equipo lleva a que me llegue la pelota y tengo que tirar.

 

Soy consciente de que estoy jugando en un nivel que es complicado ya que me enfrento con muchos chicos que están muy bien físicamente. Y por ahí se me hace complicado jugar uno contra uno o desequilibrar. Soy consciente de la función que tengo en la cancha». De todas maneras Benavídez reconoce que está en un momento de rapidez mental antes que física: «En defensa no soy un gran defensor, aparte no tengo las condiciones físicas que tienen los demás. Por ahí la experiencia que tengo me hace estar en el momento justo para ayudar o colaborar. En ofensiva lo que trato de hacer primero es buscar a mi compañero, buscar al que esté mejor posicionado para tirar. Después si me toca ejecutar lo haré pero primero busco al que este mejor dentro de la cancha». Consultado sobre lo que le falta a Parque Sur para llegar a su techo, el capitán destacó: Nos falta jugar de visitante como jugamos de local. Los partidos que hemos ganado de visitante lo hemos logrado por jugar de la forma que lo hacemos en casa. Somos un equipo muy temperamental, no nos salen las cosas bien y nos está costando madurar como grupo y no reprocharnos muchas cosas. Ese granito para crecer nos está faltando, tanto de jugadores como de cuerpo técnico. Creo que si mantenemos el ritmo de juego que tenemos de local como de visitante creo que vamos a poder pelear más partidos de visitante y traernos más triunfos de afuera.