Los cancilleres Héctor Timerman y Luis Almagro se reunirán por el dragado del río Uruguay, en Buenos Aires, probablemente el 9 de marzo. De esta forma se dará continuidad al encuentro de octubre pasado, en el cual ambos diplomáticos procuraron avanzar en temas de gestión bilateral, entre los que se destacó el dragado del río. La expectativa
regional está centrada en este encuentro, ya que los intendentes argentinos y uruguayos del Comité Hidrovía vienen gestionando este encuentro desde hace meses. A comienzos de febrero, el ministro de Relaciones Exteriores uruguayo, había expresado a intendentes de ambas márgenes de esa vía navegable que la intención es profundizar el curso de agua «porque hace una diferencia absoluta en la vida de la gente de ambas orillas».
Respaldo provincial
«Es un tema sobre el que se ha venido avanzando en forma permanente, la Provincia ha realizado un dragado de emergencia a 21 pies de calado junto a la Dirección Nacional de Vías Navegables porque el desarrollo portuario ha sido definido como una política de Estado para el gobernador Urribarri, por eso mismo ha respaldado de forma constante el trabajo del Comité Hidrovía y ha gestionado ante los Presidentes, Cristina Kirchner y José Mujica una pronta resolución de este tema», señaló el presi-
dente del Instituto Portuario de Entre Ríos, Carlos María Scelzi.
Dragado discutido
El dragado de mantenimiento y profundización del río Uruguay es un tema que viene sin resolución, publicó La República de Montevideo. En marzo de 2012 se concretó el llamado a ofertas para la presentación del proyecto de dragado del río Uruguay. En abril de 2013 se hizo público el informe de la empresa ganadora, sobre las alternativas para dragar desde el kilómetro cero hasta el 187, incluyendo los canales de acceso a Concepción del Uruguay y Paysandú. Poco después, el entonces vicecanciller Roberto Conde y el embajador de Argentina en Uruguay, Dante Dovena, adelantaron que el dragado comenzaría en la primera mitad de 2014 y que ambos gobiernos financiarían por partes iguales el costo de la obra, estimado en 36 millones de dólares para la profundización y 10 millones para el mantenimiento.