A raíz de denuncias recibidas y en relación a modalidad delictual de «estafa”, la que siempre comienza por un contacto telefónico.
La misma consiste en hacerle creer a una persona, preferentemente de avanzada edad (ancianos) donde mediante un elaborado engaño, aduciendo que es un allegado del círculo familiar cercano, con el ardid de un cambio de billetes ya sea de moneda extrajera o nacional les solicitan juntar el mayor monto de dinero, posteriormente una persona que sería empleada de una entidad bancaria los visita y retira todo el dinero.
Siendo importante tener en cuenta que en la mayoría de los casos, es la propia persona quien en realidad aporta detalles de los datos (nombres, direcciones) que los delincuentes utilizan.
Si bien los delincuentes llaman a números telefónicos elegidos al azar, puede ocurrir que ya cuenten con alguna información de la persona que recibe la comunicación, llamándolo por su propio nombre o apellido. Hoy en día, puede resultar fácil por el acceso a internet, conocer cuál es el número telefónico que corresponde a una dirección puntual y cuál es el nombre y apellido del titular de la línea, por lo que los delincuentes pueden contar con esa información de antemano, aún sin conocer a quienes están llamando.
Así también, cuando en los llamados telefónicos refieren pertenecer a alguna entidad, solicitando que realicen transacciones en los cajeros automáticos, ante algún tipo de reintegro de dinero, generalmente enmarcado en un retroactivo por reparación histórica para jubilados de ANSES. Se solicita se acerquen a las oficinas oficiales para corroborar tal situación, o bien comunicarse con la dependencia policial más cercana.
Aconsejándose:
1- Ante una comunicación telefónica de ese tipo, lo esencial es guardar la calma.
2- Es recomendable cortar la comunicación inmediatamente.
3- Nunca decir nombres o aportar otra información sobre el grupo familiar que pueda ser utilizada por los estafadores.
4- Siempre desconfíe si le solicitan dinero o algún tipo de depósito.
5- Instruir a todas las personas de la casa que puedan atender el teléfono, fundamentalmente a los niños, mayores y al personal doméstico, acerca de no aportar datos a desconocidos sobre los miembros de la familia o el movimiento del hogar.
6- Ante cualquier tipo de situación que les parezca sospechosa, comunicarse con la dependencia policial más cercana, o a los números telefónicos 101 o 422222, para poder corroborar la información.