El alemán, que metió el gol del triunfo en la final del Mundial de Italia ’90, está en la ruina y le ofrecieron un nuevo empleo.
El exfutbolista alemán Andreas Brehme, campeón del mundo en Italia 1990 y verdugo de la selección argentina en la final, se encuentra quebrado económicamente y busca desesperadamente un trabajo.
Breheme, autor del gol de la final ante la Argentina de Maradona con un preciso penal, está a punto de perder su casa por una deuda que los medios alemanes calculan en unos 200 mil euros. Por este motivo, al exjugador del Bayern Munich, Inter y Zaragoza le llegó una oferta laboral bastante extraña: trabajar como personal de limpieza de sanitarios.
“Estamos dispuestos a emplear a Andreas Brehme en nuestra empresa. Así se enterará de lo que es trabajar de verdad limpiando sanitarios e inodoros. Eso le servirá para enterarse de cómo es la vida y mejorar su imagen. Eso sí es ayudar a Brehme”, sostuvo el presidente de la empresa Oliver Straube.
El célebre defensor, destacado en la década del ’90, no trabajaba desde 2006, cuando abandonó su puesto en el cuerpo técnico del Stuttgart.