El gobernador Gustavo Bordet dio a conocer que en el último año el empleo privado de la provincia creció 3,1 por ciento. También explicó que, más allá de dificultades coyunturales, en el país “hay crecimiento económico”, y describió los desafíos que enfrenta Argentina.
“El nivel de desarrollo y de empleo está creciendo, al punto tal que el desempleo marca una curva de descenso”, expresó Bordet, y sostuvo que “hay dificultades coyunturales que están a la vista. Hay una inflación mundial que en Argentina es más marcada. Claramente es el principal problema que tiene hoy, quizás, nuestro país. Pero hay crecimiento económico a pesar de que hay inflación”, acotó.
Tras enumerar los indicadores de la economía nacional que expresan ese análisis, subrayó que el crecimiento de la actividad económica también se ve reflejado en las recaudaciones provinciales, y puso de relieve que para las vacaciones de invierno “en Entre Ríos esperamos 600.000 turistas, una cantidad récord, un movimiento realmente muy importante”.
Luego describió que “las economías regionales de Entre Ríos, si bien no están en el mejor de los mundos, registran niveles de rentabilidad aceptables”, e indicó que, como consecuencia de ello, “el empleo privado en la provincia de Entre Ríos, creció 3,1 por ciento” en el último año.
También se refirió a la reunión que mantendrá con la ministra de Economía, Silvina Batakis, y reiteró el apoyo de los gobernadores a la titular de la cartera económica. Coincidió con que “es fundamental” reducir el déficit fiscal, “porque es elemental tener cuentas públicas saludables para poder llevar adelante la gestión de gobierno”.
“A mí me costó mucho tener una situación fiscal sólida como tiene hoy la provincia, que permite cumplir con las obligaciones, presupuestar, asignar recursos, programar, planificar”, recordó el mandatario provincial. “Es clave el equilibrio fiscal, tener las cuentas en cero, porque el superávit fiscal tampoco es bueno, significa que hay acciones de gobierno que no se están ejecutando”, continuó.
Desafíos
Si bien reconoció las dificultades que atraviesa la economía argentina, Bordet descartó que el país esté en una crisis como la que sucedió a principios del 2000. Explicó que “con un programa económico que pueda morigerar y controlar la inflación, que logre confianza, interna y externa, en las variables económicas, se puede encaminar el país”.
“Es el principal desafío que tiene no sólo el gobierno sino la Argentina, porque es algo estructural que se ha incrementado en los últimos años”, concluyó el mandatario entrerriano.