El gobernador Gustavo Bordet hizo uso de la palabra durante el encuentro de los mandatarios provinciales con el presidente Alberto Fernández para analizar los avances del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. “Estar presentes hoy es un acto de responsabilidad institucional”, expresó.
“Hay una situación dramática en torno a los pagos que debe afrontar el país por los compromisos en dólares asumidos en el exterior”, describió el mandatario entrerriano, y advirtió que “esto incumbe al gobierno nacional pero también va a impactar en nuestras provincias”. Estaban presentes el jefe de Gabinete, Juan Manzur y los ministros de Economía, Martín Guzmán y del Interior, Eduardo de Pedro.
“Todos quienes gobernamos nuestras provincias tenemos responsabilidad en nuestras gestiones pero también en poder resolver los problemas de la Nación”, recordó en ese sentido, y sostuvo “de esto se trata el federalismo bien entendido, de ida y de vuelta”.
En esa línea remarcó que “no entiendo el hecho de que se pueda pensar en beneficios, en tener que regalar una foto, o el beneficio político a corto plazo de asistir o no a una reunión. Quienes tenemos la responsabilidad de gobernar no podemos esquivar esta discusión”.
Además, celebró la “vocación convocante” del presidente Alberto Fernández “para poder demostrar los alcances de la negociación que se está llevando adelante, hablar con claridad de el origen de la deuda y, fundamentalmente, de cómo la solucionamos para darle previsibilidad a lo que nos queda de gestión”.
No obstante, también sostuvo que arribar a una solución con el FMI permitirá a “las gestiones que nos sucedan contar con previsibilidad para poder llevar adelante las variables macroeconómicas”.
En otro tramo de su discurso Bordet puso de relieve el peso de los vencimientos en dólares que prevé el esquema actual de la deuda para 2022 y 2023, que ascienden a 18.000 y 19.000 millones de dólares respectivamente. “Es importante que se explicite porque demuestra palmariamente que es imposible cumplirlo. Porque se tomó irresponsablemente sabiendo que no se iba a poder cumplir con ese cronograma de pagos como estaba establecido”.
“Por también es fundamental saberlo, porque en caso de no haber acuerdo esos vencimientos van a impactar sobre todas nuestras provincias, las que compartimos la visión política con y las de la oposición”, enfatizó Bordet.
Por último, se mostró de acuerdo con que “se discuta en el Congreso”, sin embargo abogó por la necesidad de un acuerdo porque “también aquí está en juego la responsabilidad institucional de la Argentina para poder seguir adelante con un programa de crecimiento y desarrollo”.