«La victoria del MAS en Bolivia no solo es una buena noticia para quienes defendemos la democracia en América Latina; es, además, un acto de justicia ante la agresión que sufrió el pueblo boliviano», consideró Alberto Fernández.
El Gobierno se hizo eco del triunfo electoral de Luis Arce en los comicios presidenciales de Bolivia y evaluó que la victoria del candidato de Evo Morales representa no sólo la «recuperación de la democracia» en ese país, sino también un «acto de justicia» para el pueblo boliviano.
«La victoria del MAS en Bolivia no solo es una buena noticia para quienes defendemos la democracia en América Latina; es, además, un acto de justicia ante la agresión que sufrió el pueblo boliviano», escribió el presidente Alberto Fernández en su cuenta de la red social Twitter.
El jefe de Estado felicitó a Arce, quien otorgó al Movimiento Al Socialismo (MAS) una amplia victoria electoral en Bolivia, a casi un año del derrocamiento de su líder y expresidente Evo Morales.
«Es una buena noticia para quienes defendemos la democracia en América Latina», expresó el Presidente sobre las elecciones que pusieron fin al mandato de facto de Jeanine Áñez, quien sucedió a Morales después de su derrocamiento.
También, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner utilizó Twitter para manifestar sus «felicitaciones a Lucho Arce y David Choquehuanca», quienes -escribió- «junto a Evo, construyeron en Bolivia un gran triunfo popular» y remarcó: «La Patria Grande feliz».
De igual manera, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, destacó la «histórica elección» y la consideró «un mensaje esperanzador para nuestra América Latina». «El pueblo boliviano recuperó la democracia, reconoció la lucha de Evo Morales y eligió el camino de la soberanía y la dignidad», reflexionó.
Siguen los cruces internos en Juntos x el Cambio
Nicolás Massot, el exjefe del bloque del PRO en Diputados, expresó que «no comparto que (el peronismo) esté secuestrado ni que sea monolítico. Creo que fue -y posiblemente siga siendo- muy heterogéneo y diverso».
La autocrítica sobre su Gobierno y los reproches del expresidente Mauricio Macri al sector «filoperonista» de su gestión siguen ampliando la brecha entre su sector, donde se ubican los «duros» del PRO, y el grupo que se autodenomina «moderado» dentro de la coalición opositora de Juntos por el Cambio (JXC).
Las declaraciones del exjefe del bloque del PRO en Diputados Nicolás Massot volvieron a agitar las aguas en el frente que integran la UCR, la Coalición Cívica y el PRO.
En una entrevista con C5N, Massot se mostró «sorprendido» por los dichos de Macri en los que cuestionó, sin nombrarlos, al exministro del Interior Rogelio Frigerio y al extitular de la Cámara de Diputados Emilio Monzó durante la gestión de Cambiemos y lo atribuyó a la «autocrítica» que ese sector realizó a poco de asumir, cuando le advirtió al exmandatario sobre el cambio en el espíritu original de la coalición de Gobierno.
«Nosotros empezamos la autocrítica cuando estábamos en el Gobierno, no diez meses más tarde de haber perdido». «Tal vez haya sido esa autocrítica que consideraron inoportuna la que nos haya costado estas declaraciones actuales», aseguró.
Massot contó que en 2017 plantearon puertas adentro del Gobierno que habían «perdido el espíritu original con el que habíamos llegado al poder: el espíritu de unidad de los argentinos». Además acusó a Macri de ser el responsable de que su Gobierno comenzara «a girar en sí mismo con actitudes muy autoreferenciales y de prejuicio con el peronismo y la oposición en general».
«No se trató de un problema de delegación, sobre todo se trató de un problema de subestimación de la política», fue la mirada de Massot, quien dijo que prueba de ello fue la convocatoria «urgente y tardía» al peronista Miguel Ángel Pichetto para completar la fórmula presidencial de Cambiemos.
Massot tampoco coincidió con el exmandatario en su afirmación de que el peronismo estaba «secuestrado» por la vicepresidenta Cristina Kirchner. «Yo no comparto que esté secuestrado ni que sea monolítico. Creo que fue y posiblemente siga siendo muy heterogéneo y diverso. Y fue esa heterogeneidad la que nos permitió tejer acuerdos» durante la gestión de Cambiemos.
Pero opinó que «esa suerte de entendimiento del gobierno fue abandonado por el Poder Ejecutivo unilateralmente».