Esta es una realidad casi cotidiana: un perro callejero, que vive en una vereda, abandonado a su suerte, ignorado ante la mirada apática de los vecinos, atacado por un dogo que se soltó.
Aunque parezcan una narración que ocupa solo breves líneas ella es una muestra de cómo se infringen tres ordenanzas al mismo tiempo. La de Perros Peligrosos, la de Control de Esterilización, y por ende la proliferación de perros vagabundos, y la de Tenencia Responsable de Mascotas. Todas estas contravenciones descriptas anteriormente estas penadas por multas económicas, algo que quizá el común de la gente no sabe. Algo que gracias a esto el Municipio aprovecha para callar y mirar hacia otro lado e ignorar peligros latentes desde la profilaxis en las personas como así también de la seguridad de ellas y del maltrato animal. Más allá de estas omisiones por parte de estos dos actores sociales, las formas de prever esta situación, que se replica a diario, está al alcance de nuestra mano y es tan sencilla como la educación y la prevención.
Partamos con la Tenencia Responsable de Mascotas. Todas las personas tienen el derecho de poseer un animal de compañía y beneficiarse con los efectos positivos que ellas conllevan pero este derecho está fuertemente ligado a la responsabilidad de esta relación.
Adquirir un animal como mascota significa en primera instancia, asumir el compromiso de disponer de bastante tiempo para brindarle y algo de dinero para cubrir sus gastos de manutención, como por ejemplo, darle comida, asistencia veterinaria, vivienda digna. Además, los animales necesitan cariño y ser respetados como seres vivos.
Algunas personas se confunden y creen que sus mascotas (sobre todo si son perros de razas grandes), son como niños que crecen, maduran y se vuelven responsables de sus actos en su estado adulto. Obviamente esto no es así, y debemos tener conciencia que las mascotas, dependen en todos los aspectos y durante toda su vida de sus amos.
Podemos definir la Tenencia Responsable como la suma de deberes y obligaciones que debe cumplir el dueño.
Estos deberes y obligaciones están orientados hacia dos grandes áreas de la relación con su mascota:
El tenedor responsable deber ser una persona que no solo se preocupa por informarse sobre las necesidades de su animal. También es una persona que además de quererla es respetuoso de los derechos de los demás y trata de generar una buena convivencia entre todos y con el medio ambiente. El no cumplimiento de ellas puede generar acciones judiciales en contra de este amo irresponsable. Él tiene que cumplir con las siguientes necesidades de su mascota:
Proveer de un medio adecuado, o sea un lugar para vivir acorde a sus necesidades, a su
Tamaño como así también lugares donde desarrollara sus necesidades básicas de comer, beber, dormir y hacer sus eliminaciones. También hay que tener en cuenta que no se debe tener animales atados permanentemente, ni enjaulados.
Brindar una alimentación adecuada a la especie, raza y edad y estado de salud como así también de atención a su la salud tanto en el aspecto preventivo como curativo. Hay que tener en cuenta que la vacunación contra la rabia es de aplicación obligatoria y está contemplada por Ley– algo que en nuestra ciudad no existe ningún tipo de Plan puesto que el Departamento de Zoonosis, encargado en esto esta acéfalo desde hace un año – y tal cuidado es para toda la vida del can.
Hay que proveer de niveles mínimos de contención y afecto, siendo totalmente incompatible
el maltrato, los abusos, la crueldad y el abandono. Pareciera ilógico que una persona quiera tener un perro para luego maltratarlo pero esto es síntoma, en muchos casos, que pueda ser un síntoma de situaciones de violencia familiar y esto es generado por la persona que infringe daños a un animal.
Recordemos que las mascotas no son responsables de ningún de los actos como por ejemplo
Las agresiones a otros animales y/ o humanos. Su dueño deberá poner todo el esfuerzo para educarla y controlarla. Hay que tener en cuenta que muchos de estos problemas pueden ser llevados a la justifica por los damnificados.
Como vemos la tenencia de animales domésticos lleva implícito grandes niveles de
Satisfacción al contar con un compañero excepcional pero también lleva la obligación de brindar cuidado y afecto y la enorme responsabilidad de responder por los actos de ellas. Por tal todas las personas tienen el derecho de disfrutar de la compañía de una mascota, pero se debe tener conciencia de la responsabilidad que ello significa.
Quizá con esto evitamos esos tantos casos de perros abandonados, descuidados y peligrosos;
Todos ellos resumidos en la estampa del principio.
Como anunciamos tenemos dos aspectos al alcance de nuestra mano, la prevención y la educación. La primera está implícita en la segunda, por esto, releamos el artículo. Es una forma consciente de decirnos, nos estamos educando.
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