La Fórmula Entrerriana sigue desarrollando futuro, la categoría más icónica de la provincia sigue superando etapas de desarrollo para volver a pista. Avanza la inyección electrónica y las pruebas de chasis Berta nacionales para equiparar con los importados Ralf, Reynard y Dallara.
La Fórmula Entrerriana es responsable de ser la creadora de leyendas e ídolos y hacerse conocida en los principales medios del país. La Fórmula Entrerriana que contemporáneamente se destacó por ser de las más potentes, ha cumplido de manera muy satisfactoria otra etapa de pruebas.
La nueva dirigencia a cargo de Roberto Rougier, que recientemente incorporara a Daniel Bouvet también, el PCR Powerchip Race y preparadores de la provincia, trabajan en pruebas determinantes sobre la implementación de inyección electrónica a los motores en uso.
El retorno a las pistas será no solo con los chasis importados Ralt, Reynard, Dallara entre otros sino también con los nacionales. Para lo que se encuentra en una etapa muy avanzada y casi definitiva para cumplir con unas de las premisas del proyecto: el equiparar nacional con importado.
El fin de semana se blanqueó en el rolo inercial un chasis Berta con motor Audi 1.6 inyección, que erogó la potencia de 164.5 CV, cifra idéntica lograda en un chasis importado, con una pérdida de 10 HP, menor a los 12HP de un importado. Con estos datos más que alentadores. Se augura un futuro sumamente provisorio como la máxima categoría de fórmulas en la provincia y una de las más potentes y ahora tecnológica también.
En menos de treinta días se probarán en pista las alternativas en pos de equiparar los chasis y se sigue trabajando en los sistemas de bridas para adaptar a los impulsores que no sean 1600cc.