Los gremios que nuclean a los estatales entrerrianos valoraron la incorporación de Salud a la discusión salarial, pero adelantaron que el ofrecimiento salarial es “insuficiente”. El lunes definen una respuesta.
El gobierno provincial ofreció a ATE y UPCN un aumento escalonado sobre los haberes de abril (que fueron del 23 por ciento promedio). Ese aumento será del ocho por ciento en mayo, otro ocho por ciento en julio y un nueve por ciento en septiembre. Los aumentos son para trabajadores activos y pasivos. Además, en el mes de julio los contratos de obra se llevarán a 35.000 pesos. De esta forma, el salario mínimo llegará en septiembre a 45.551, lo que representa un incremento del 70 por ciento respecto del último haber del año pasado.
“La propuesta es insuficiente, no es acorde a lo que planteamos y esperamos que el miércoles, en el cuarto intermedio, se puedan corregir situaciones puntales porque, ante el avance inflacionario, el 8% como primer tramo queda corto y planteamos que debe ser del 13%”, comunicó a Elonce TV el secretario general de ATE, Oscar Muntes.
Respecto de la cláusula de revisión, desde el sindicato también se reclamó que “la convocatoria no debe ser en octubre, sino en septiembre, porque la inflación es muy compleja y estirar la paritaria generaría mucha mayor incertidumbre, siendo que la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores del 2015 al 2021 es del 40%”.
Respecto a que, en el mes de julio, los contratos de obra se llevarán a 35.000 pesos, el sindicalista apuntó que “debe ser antes y debe garantizarse para todos los trabajadores”.
La propuesta salarial para los gremios estatales también comprende aumentos de hasta el 30 por ciento para el personal de salud, prevé aumentos para médicos, personal de enfermería y aumentos en los códigos por Covid para los agentes sanitarios. En ese sentido, Muntes valoró que el reconocimiento al título de los profesionales de Enfermería, pero advirtió que “excluye a 4.000 enfermos que deben ser tenidos en consideración”.
ATE convocó para el lunes a plenario de secretario de plenario general y consejo directivo provincial donde se analizará la propuesta y llevará la contestación a la reunión del miércoles.
“Ningún trabajador tiene que estar por debajo de la línea de la pobreza, y el INDEC dice que, para no ser pobre en el país, el trabajador debe percibir 64.000 pesos, pero hoy se garantizan entre 40 y 41.000 pesos de mínimo”, apuntó Muntes al argumentar: “Si queremos construir una paritaria en la que se recupere el poder adquisitivo, debemos seguir los parámetros que planteamos, porque si no será muy desigual y seguiremos perdiendo”.
Por su parte, la secretaria general de UPCN, Carina Domínguez, explicó que “el porcentaje que se otorgó al comienzo de la paritaria responde a una recuperación del año pasado, cuando no hubo discusión”.
“Y en esta instancia, hablamos de un 25% en tres tramos para el escalafón general, lo que se traduce en un 33% promedio en el escalafón de Salud”, indicó al destacar los reclamos que el sindicato llevó a los encuentros con el Ejecutivo entrerriano.
Si bien Domínguez valoró que el ofrecimiento del Gobierno provincial incluyó a Salud en la negociación, sostuvo que el ofrecimiento salarial “es insuficiente porque los salarios sobre los que se aplican estos porcentajes son bajos”.
De igual manera ponderó que “se incorporó la discusión sobre el adicional, el adicional Covid, el código 234, el pago del título para los licenciados de Enfermería que antes no estaba presente en la discusión y que fue contemplado producto del planteo de UPCN en las mesas técnicas”.
UPCN definirá el lunes en reunión de comisión directiva si acepta o rechaza el ofrecimiento del gobierno provincial. Para Domínguez, “es central el modo en el que se establezca la cláusula de revisión, porque el gobierno presenta esta propuesta como final, pero se pidió que se revean los contratos de obra y otras situaciones que podrían ser mejoradas para la próxima instancia”.
Mientras que Muntes apuntó que fueron advertidos en la mesa paritaria, respecto a que el gobierno retiraría el ofrecimiento en caso de no ser aceptado. “No nos gusta el camino de la extorsión. El condicionamiento no sirve como forma democrática de trabajo”, cerró. (ElOnce)