Dos delincuentes la mataron de un balazo en la espalda cuando la abordaron para robarle el teléfono celular en la puerta de su casa de la localidad bonaerense de Villa Pineral.
El hecho ocurrió el domingo por la tarde, alrededor de las 19.40, en la calle D`Oliveira 4045, en dicha localidad del partido de Tres de Febrero, donde la víctima, identificada por la Policía como Agostina Brega (28), vivía junto a su madre, su marido y su hijo de 3 años. Las fuentes informaron a Télam que todo comenzó cuando la mujer despedía a su cuñada, quien estaba al mando del volante de su auto detenido frente a la vivienda. En ese momento, dos delincuentes que iban a bordo de una moto llegaron por detrás, la apuntaron con un arma de fuego y le exigieron la entrega de sus elementos de valor.
Según las fuentes, la docente entregó su teléfono celular cuando uno de los asaltantes efectuó un disparo que impactó en su espalda. Los delincuentes huyeron rápidamente, mientras que la cuñada llamó a la ambulancia, aunque un grupo de vecinos trasladó a la mujer baleada hasta un hospital zonal, donde murió poco después. De acuerdo a los voceros, efectivos de la comisaría 4ta. de Villa Pineral fueron alertados del crimen y recabaron datos a través de la cuñada, ya que en ese lugar no hay cámaras de seguridad que puedan contribuir en la identificación de los agresores. Además, personal de la Policía Científica realizó los peritajes correspondientes y determinó que el arma utilizada por el homicida fue una pistola calibre 9 milímetros. Un jefe encargado de la pesquisa dijo a Télam que la hipótesis del forcejeo quedó descartada y los investigadores creen que al delincuente se le escapó el balazo.
En tanto, un vecino del barrio aseguró a la prensa que a Agostina «la mataron por un celular» y que en el barrio hubo «desesperación» ante los gritos de la madre de la víctima. «Un pariente de ella me dijo que iban a ir a cenar y vino a buscar al esposo cuando aparecieron dos jóvenes en moto», afirmó el hombre, que declaró como testigo ante los efectivos que encontraron la vaina servida del arma utilizada en el crimen. Según el vecino, la ambulancia «tardó más de 30 minutos» en llegar, por lo que los vecinos ayudaron al marido de Agostina y la cargaron en una camioneta para llevarla al hospital ya que ella todavía «se movía». «Cuando trasladamos a la chica el marido no hablaba y se agarraba el pecho», relató el hombre y agregó que la víctima y sus familiares «hacía muchísimos años que vivían acá». Agostina nació en Concordia y creció en el barrio Lezca de esa ciudad, donde era alumna de la escuela de las Hermanas Mercedarias. Durante su adolescencia partió a vivir con su madre a la provincia de Buenos Aires.