En el final aceleró y se llevó el partido por 65 – 58 ante La Rioja, que fue la revelación del torneo. Luego de recibir duros golpes en las semifinales, ambos equipos buscaban redimirse y concluir de la mejor manera el certamen.
El cotejo por el tercer puesto comenzó con el Campeón 2017 dormido, La Rioja lo aprovechó y se adelantó en el marcador. Luego de un tiempo muerto pedido por Nicolás Giorello, los chicos entrerrianos despertaron de la siesta, cambiaron la actitud y así la diferencia que los separaba quedó en solamente un triple. En el segundo período, Joel Scrosopp dejó la banca para liderar a los entrerrianos -registró 9 puntos, 3 rebotes y 2 asistencias en el cuarto- ante un rival que llegaba tarde a cada lanzador y cada rebote. El parcial de esos 10 minutos fue de 28 – 12 para Entre Ríos. El equipo del oeste del país, ajustó la defensa -el punto destacado que lo trajo hasta aquí- y solo le permitió anotar 8 tantos en el tercer cuarto a su rival. En ataque, los riojanos, con Santiago Contreras en cancha, tuvieron mayor cordura, la que aprovechó Mateo Corso para anotar y ponerle suspenso a los momentos finales. La definición fue palmo a palmo e intercaló aciertos y errores de los dos lados. A menos de 2 minutos, Entre Ríos sacó 4 de ventaja, algo inédito en el cuarto, y el nerviosismo se apoderó de los riojanos que apelaron al individualismo como último recurso, pero no fue efectivo. El cuarto puesto para La Rioja ha sido una grata sorpresa, el equipo mostró una gran entrega y, por primera vez en la historia, accedió a las instancias finales. Mientras que para Entre Ríos, subirse al podio sin dudas es una alegría, pero tiene gusto a poco teniendo en cuenta que venían a retener el título y cerró una muy buena campaña en el certamen con récord de 6 triunfos y apenas una derrota (en semifinales con Buenos Aires).
El uruguayense Thiago Scevola se destacó en el elenco “panza verde” con 14 puntos y 8 rebotes, escoltado por Joel Scrosopp, autor de 11 unidades.