Los ambientalistas sostienen que no hay ningún motivo válido para modificar la Ley que hasta el momento prohíbe la venta de rollizos de madera a Uruguay. Con la media sanción de Senadores, sólo resta convencer a los Diputados para que eviten la aprobación.
Integrantes de la Asamblea Ambiental pidieron una audiencia con el gobernador, Gustavo Bordet. Fue en el marco de la última visita del mandatario a la ciudad. Bordet se comprometió a recibirlo a la brevedad, pero en el medio se dio media sanción a la modificación de la Ley de la Madera. El objetivo del Ejecutivo provincial, es permitir que Entre Ríos vuelva a venderle rollizos de madera a Uruguay. Los asambleístas aseguran que esto atentaría contra los aserraderos de la provincia y además, estaría nutriendo de materia prima a la pastera UPM ex Botnia.
El pedido de diálogo
Desde la Asamblea se manifestaron muy preocupados por el avance de los legisladores y aseguraron que la última alternativa está en mano de los Diputados de Entre Ríos. Expresaron que quieren hablar con Juan José Bahillo, con Leticia Angerosa y con el que haga falta para explicarles los argumentos y hasta facilitarles material. Será entonces la última ficha que jugará la Asamblea para evitar que la Ley de la Madera ya no sea tal y como se la pensó en 2008.
Días atrás, el ambientalista Martín Alazard, declaró a El Día que “la única motivación (para modificar la norma) fue que Bordet recibió grandes acuerdos y amistad con el Presidente de la República (Mauricio Macri), junto a las influencias de la corporación forestal”. Asimismo dijo que “Cambiemos y el Frente para la Victoria se pusieron de acuerdo por intereses económicos” y agregó: “a las motivaciones de Macri y Bordet se le suman los intereses de la Federación Forestal Argentina que es conformada por grandes corporaciones”.
“Que no nos den un cachetazo”
Los ambientalistas repartieron volantes con un fuerte mensaje: “Todos los seres humanos queremos vivir en un ambiente sano que favorezca la salud y la vida. En nuestra región lo hemos demostrado de muchas maneras; una de ellas es la lucha generada en Gualeguaychú en contra de las pasteras.
Hoy ustedes, a propuesta del gobernador, Gustavo Bordet, corren el riesgo de traicionarnos esgrimiendo falsas razones para derogar la Ley de la Madera Nº 9759. Tanto un buen proyecto foresto industrial, como la fabricación local de todos los derivados de la madera, en especial las viviendas, como las fuentes de trabajo, como los negocios razonables de los forestadores, pueden llevarse a cabo sin derogar la mencionada norma. No nos den un cachetazo alimentando con rollizos a UPM ex Botnia, fábrica ilegal y altamente contaminante”.