El base sanfrancisqueño se mostró conforme porque está logrando su objetivo en Rocamora de Concepción del Uruguay (Liga Argentina), jugar una importante cantidad de minutos y recuperar el protagonismo que había perdido en San Isidro.
El armador sanfrancisqueño, después de jugar muchos años en los “Halcones Rojos”, tuvo que cambiar de aire buscando un mayor protagonismo. Algo que logró en Rocamora.
El ex-San Isidro no ocultó su bronca porque Rocamora perdió los dos últimos compromisos del año: 92-91 ante Centro Español y 79-78 contra Petrolero. Ambos en condición de visitante, en la provincia de Neuquén.”Hubiera estado muy bueno manotear un partido de visitante, porque ahora ganar afuera vale dos puntos ya que antes se arrastraba la mitad”, se lamentó el base.
De cara a lo que viene, señaló: “Ahora en enero tenemos tres partidos seguidos en casa, los últimos cuatro encuentros que jugamos como locales los ganamos por más de veinte puntos y eso no da la tranquilidad ya que ante nuestra gente estamos haciendo las cosas muy bien”.