Afirman que un helado ayuda a reducir los efectos secundarios de la quimioterapia

Este postre desarrollado por la Universidad Federal de Santa Catarina, en Brasil, combate las náuseas, la pérdida de apetito y las llagas bucales.

La quimioterapia es uno de los tratamientos más efectivos contra el cáncer. Ataca las células enfermas para detener su diseminación o retrasar su crecimiento. Sin embargo, el proceso también puede dañar las sanas, lo que provoca la aparición de algunos efectos secundarios. Entre las consecuencias más comunes se encuentran la fatiga, las náuseas, los vómitos, la pérdida de apetito, las llagas bucales, el dolor y la caída del pelo. Hay formas de prevenir o controlar algunos de estos efectos. Con ese fin, el último hallazgo es un postre: un el helado. El Hospital Universitario de la Universidad Federal de Santa Catarina (Brasil) desarrolló un helado capaz de actuar como complemento alimenticio y anestesiante sensorial en pacientes en quimioterapia. Tras un año de pruebas, se concluyó que este alimento logra contrarrestar de forma efectiva muchos de los efectos secundarios de este tratamiento. «Los principales deseos alimentarios de los pacientes con cáncer en quimioterapia son alimentos fríos, ácidos, y frutas», explicó la profesora Francilene Kunradi Vieira, del Departamento de Nutrición de la universidad y supervisora de la investigación. La especialista precisó que el frío favorece la salivación y reduce los efectos secundarios provocados por la quimioterapia en la boca, aliviando heridas, aftas, la sensación de boca seca y la mucositis (inflamación). La idea del helado como tratamiento surgió en base a la crioterapia, la técnica que utiliza bajas temperaturas para combatir ciertas afecciones. De hecho, el hielo se usa como remedio terapéutico desde la antigüedad, en la cultura egipcia, griega y romana. Por otro lado, este postre actúa como un complemento alimenticio. «El helado es fuente de proteína, de fibra, tiene bajo contenido de grasa y está exento de lactosa», enumeró Kunradi Viera. Es que la fórmula de la universidad brasileña contiene azúcar orgánica, polidextrosa (una fibra soluble), proteína de la vendimia aislada y aceite de oliva desodorizado, (una variación que no proporciona el sabor del ingrediente) en sustitución de la tradicional proteína de la crema de leche y la grasa vegetal hidrogenada. Pero además tiene otro beneficio más pensado para la salud mental, dado que hace posible que la dietoterapia se haga con alimento y no con medicación. Por otro lado, es una herramienta de integración del paciente con su entorno familiar. «Toda la familia puede comer el helado, el paciente no necesita estar solo tomando su suplemento mientras el resto consume un postre», destacó la especialista. Actualmente, el helado se ofrece como postre exclusivamente a los pacientes de oncohematología, en los sabores chocolate, frutilla, limón y ananá con jengibre. La recomendación es que consuman entre dos y tres unidades a lo largo del día. “Fue una sorpresa maravillosa, el helado es delicioso y minimiza los efectos de la quimioterapia”, destacó Carol Gilda Martins, asistente financiera y paciente de la unidad hospitalaria por un cáncer linfático, quien experimenta molestias especialmente en la boca.