– El 19 de enero se desarrollará la audiencia pública en la que se analizará un incremento de la tarifa de gas en el país · Las dos distribuidoras que operan en Entre Ríos, GasNea y Redengas, ya elevaron las solicitudes formales basadas en la falta de aplicación de los ajustes semestrales.
El Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) convocó a audiencia pública el 19 de enero, para poner en consideración la adecuación transitoria de la tarifa del servicio público de transporte de gas natural y del servicio público de distribución de gas por redes.
La audiencia se desarrollará en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y los interesados participarán exclusivamente de manera virtual o remota, conforme se dispuso en la Resolución N° 518 publicada en el Boletín Oficial.
En junio el Enargas había formalizado cuadros tarifarios de transición cuyo impacto en factura promediaron el 6% para los usuarios residenciales del servicio de gas por redes, mientras que para las pymes y comercios rondó el 4%.
Días atrás, el secretario de Energía de la Nación, Darío Martínez, detalló que por decisión de Alberto Fernández y Cristina Fernández “las correcciones tarifarias siempre serán menores” que los aumentos de los salarios, jubilaciones, AUH y asignaciones familiares. Y estimó que la corrección tarifaria en las facturas, tanto de energía eléctrica como de gas será del 20% para la generalidad de los usuarios en 2022.
De todos modos, las empresas distribuidoras y transportistas de gas elevaron al Enargas pedidos de aumento de tarifas de entre un 70% y un 120%, aunque su impacto real en las boletas oscila entre el 30% y el 40%.
UNO accedió a los documentos con cada una de las peticiones y fundamentos por parte de las empresas de transporte y de distribución del suministro en el país que fueron elevados días atrás.
En el caso de GasNea, concesionaria del servicio en gran parte de Entre Ríos y de otras provincias de la Mesopotamia como Chaco, Corrientes, Formosa y Misiones, elevaron dos propuestas de modificación de tarifa.
Contemplando la modificación de los costos en más de dos años debido a que desde mediados de 2018 no se aplica la adecuación semestral tarifaria correspondiente a las normativas vigentes –en ese período hubo dos actualizaciones transitorias, en 2019 y en 2021– planteó dos escenarios alternativos: en uno de ellos el impacto final en la tarifa de los usuarios no supera el 20%, ya que van desde 19,46% en la categoría de clientes residenciales R1 o del 15,31% y el 15,97% en R2 y R3, en comercios el 10,89% en SGP1, por ejemplo, o el 19,16% en entes de bien público (EBP1).
El otro cuadro propone entre un 20% y un 25% en promedio en las distintas categorías.
Por su parte, Redengas SA, subdistribuidora prestataria del servicio a más de 55.000 hogares paranaenses, hizo en su escrito un repaso de sus 32 años, en los que apuntó que 15 años fueron gestionados bajo las condiciones impuestas por la Ley de Emergencia Económica. En ese sentido, argumenta que desde 2000 a 2012 se mantuvieron en los mismos valores, y “recién allí se aplicaron ajustes parciales que fueron claramente insuficientes para recuperar el poder adqusitivo de los ingresos necesarios para reponer y mantener el nivel de inversiones requerido y para ejecutar desde la empresa un nivel de servicio adecuado”.
Luego de período de ajustes retomado, Redengas recordó: “En abril de 2019 se efectuó el último ajuste autorizado de acuerdo con la normativa vigente, por lo que la falta de actualización de los ingresos de nuestra empresa alcanza el 180%”.
Menciona el incremento durante los últimos dos años y medio del 200% en los combustibles, y del 132% en la cotización del dólar, “moneda en la que cotiza la mayor parte de los insumos con los que trabaja la empresa. En tanto que el ajuste tarifario autorizado en este período –en junio de 2021, de carácter transitorio– fue del 20%”.
Y tras hacer referencia a “la situación financiera de la empresa afectada por la combinación de falta de actualización tarifaria, sobreestimación de los volúmenes considerados para el cálculo de la tarifa, el aumento de los índices de mora y un significativo aumento de los costos de operación e inversión por efectos de la inflación”, propone un cuadro tarifario “cuyo impacto en la factura final de un usuario residencial promedio, sin considerar variaciones en el gas ni en el transporte, sería de aproximadamente 40,5% respecto de la tarifa vigente, lo cual representa un incremento promedio total final en la factura de aproximadamente 562 pesos más impuestos por mes”.
· Actualizaciones y composición de las boletas de los clientes
Todas las empresas transportadoras y distribuidoras de gas presentaron sus propuestas de actualización de los cuadros tarifarios: Transportadora de Gas del Sur (TGS); Transportadora de Gas del Norte (TGN); Litoral Gas; Metrogas; Distribuidora de Gas Cuyana; Gasnor; Camuzzi; Distribuidora de Gas del Centro; Naturgy; GasNea y Redengas.
La intención es que las subas sean aplicadas a partir de marzo.
Las solicitudes formalizan reclamos por actualizaciones que oscilan entre el 75% y el 85%, aunque de esos porcentajes aproximadamente un tercio se traslada al precio final de las facturas que reciben los usuarios.
La composición de las boletas determina el costo final de las tarifas a cada uno de los clientes: incluye rubros como el costo de transporte y distribución, el precio del gas y los impuestos. Además, para la facturación y la aplicación de los conceptos tarifarios hay ocho categorías, según rangos de consumo.