San Cirilo de Jerusalén, obispo y doctor de la Iglesia Nació el año 313 en Jerusalén, ciudad de la que fue obispo desde el año 348. Se destacó por el gran impulso a la preparación catequística de las personas que pedían el bautismo. Fue perseguido por los arrianos que lograron por dos veces desterrarlo, pero al final fue restablecido en su sede por el emperador Teodosio. Asistió al segundo Concilio de Constantinopla, donde fue condenado nuevamente el arrianismo. Gobernó la Iglesia de Jerusalén hasta su muerte, el año 386. Es uno de los llamados «Padres Griegos». En 1882 León XIII lo declaró doctor de la Iglesia.