El conjunto Merengue venció por 3 a 0 al Levante. Le sacó cuatro puntos al Barcelona y tres al Aleti. Goles deRonaldo, Marcelo y encontra de Nikos.
El Real Madrid asestó un golpe de efecto a la Liga, extendiendo su buen momento y cortando la racha sin derrotas del Levante de Joaquín Caparrós por 3 a 0, para distanciarse cuatro puntos del Barcelona, y comenzar a dejar la lucha por el título en cosa de dos, en su pulso con el Atlético de Madrid.
El Real Madrid juega con una intensidad que desea el ‘Tata’ Martino para su equipo. Carlo Ancelotti dio con la tecla y en el momento en el que se deciden títulos y se caen equipos por el camino, sus jugadores muestran la mejor de sus caras. Saltan al césped con hambre de éxito. Buscan el gol desde el pitido inicial. Imponen su estilo, con personalidad de querer el balón y velocidad ofensiva para golpear al rival.
El Levante llegaba en su mejor momento pero el Santiago Bernabéu son palabras mayores para cualquier equipo en este momento. Ocho jornadas sin caer derrotado sirvieron de poco cuando el Real Madrid le encerró en su terreno desde el primer minuto. El ritmo de juego era altísimo, al ritmo de Modric, Di María y Carvajal desbordaban por banda, y los tres de ataque comenzaban a afinar su puntería.
Keylor Navas, el portero revelación del campeonato, comenzaba a intuir lo que le esperaba. Su actuación arrancó con una gran parada a Cristiano. El pase picado, medido, de Di María, lo enganchó el portugués e hizo volar al portero del Levante.
Era el aviso de Cristiano que a la segunda encontró el premio del gol. Rompió el partido el Real Madrid de una forma poco habitual, con un saque de esquina. Se repitieron los socios. Lo puso Di María y cabeceó Cristiano tras un salto prodigioso, ajustando su remate al poste. Once minutos y liderato recuperado.
Con el viento a favor y cómodo en el campo, los de Ancelotti jugaron con paciencia. Supieron encontrar espacios en una defensa rival poblada. Aplicaron la velocidad de juego necesario y aunque no mantuvieron el ritmo, fueron generando oportunidades. Benzema asistió a Di María que se topó con Keylor, rápido en la salida para tapar espacios en el mano a mano.
El Levante, pese a jugar con dos delanteros, apenas tuvo presencia en área madridista. Ivanschitz dejaba un disparo a la grada y Diego López dudaba en una salida, en la que tropezaba con Ramos y arrollaba a Pedro López. Dejó su puerta a cero pero tuvo síntomas de un extraño nerviosismo tras el tanto encajado en el Calderón que tanta crítica levantó.
En la otra portería Keylor no paraba de trabajar. Sacó todo a Benzema, hasta un disparo a quemarropa. Si el Levante adelantaba líneas, llegaban pases en largo de Ramos o Xabi Alonso que les cogía la espalda. El francés siempre bien ubicado en zona de remate pero cuando no se topó con el portero rival lo hizo con los postes. Así cerró el primer acto, con un testarazo a la madera.
Se abrió el segundo con el mismo monólogo y tuvo premio rápido. El duelo quedó sentenciado gracias a Marcelo. El brasileño mostró su cara más ofensiva en el partido. Una de sus incorporaciones la finalizó con calidad. Al pase de Cristiano respondió con un amague en bicicleta y un derechazo con rosca a la red. Era el minuto 48 y en el 80 volvía a ser protagonista con un centro que mandó a su propia portería Nikos en su intento de despejar a córner.
Ya estaba el Levante con todo perdido y jugando en inferioridad numérica. David Navarro fue castigado con dureza a una entrada inoportuna y dura, abajo a Cristiano. Un reencuentro que en el pasado rompió la ceja al portugués sin castigo del colegiado y hoy fue excesivo.
El Real Madrid disfrutó de su dulce momento. Benzema en tres ocasiones, una de ellas al travesaño, Marcelo, Ramos y Di María tuvieron oportunidades para hacer más amplio un triunfo cómodo que acabó con preocupación. Con Arbeloa lesionado para tres semanas, Dani Carvajal fue retirado en camilla con gestos de dolor tras caer cuando bajaba a defender. Ancelotti puede encontrar un problema en el lateral derecho.