Alejandra Martínez, una de las vecinas autoconvocadas, dijo ayer a La Prensa Federal que «hace más de 40 años que estamos en esta situación, nadie nos soluciono nada. Hoy (por ayer) vinieron con un máquina y están emparejando la calle, pero hace más de 5 meses que abrieron una zanja para entubar la calle». Este barrio es bajo y recibe agua de otras calles, por lo que, al no haber desagües se inundan las casas. «Cuando llueve mucho, nos llega el agua a la cintura y tenemos que hacer defensas en las puertas para que el agua no entre», se quejó Martínez. Cabe
destacar que esa zona de Villa Las Lomas recibe aporte de caudal del área que comprende la cuenca del FAPU y, como no se han realizado obras de entubado hacia el arroyo Las Ánimas, el agua se estanca en las manzanas que bordean la calle 20 del Oeste, entre Posadas y Estrada. Ante la situación planteada, los vecinos llegaron ayer a la comuna local con la idea de que Schepens los reciba. Por esa razón, se dirigieron primero a la sede de la Intendencia en el tercer piso, desde donde fueron acompañados a la Secretaría de Obras Públicas. En ese lugar los atendió finalmente el ingeniero Mario Acuña, titular del área. Durante la tarde de ayer, maquinaria vial de la Municipalidad realizaba tareas de zanjeo sobre calle 20 del Oeste y Posadas, completando parte de los trabajos iniciados en la mañana, cuando colocaron broza en la calzada. «Necesitamos que de manera urgente encaren un proyecto para entubar las calles», dijo en el lugar una vecina. Por su parte, Alejandra Martínez contó que Acuña les había mencionado la posibilidad de «conseguir fondos para llevar adelante la solución definitiva», pero ahora «por lo menos queremos que hagan el zanjeo desde Estrada hasta Posadas», señaló con preocupación Martínez. En los últimos años, la urbanización de la zona, especialmente con la radicación de planes de viviendas, han aportado problemas a la complicada situación topográfica de la zona, pero también la imprevisión ha consolidado viejos inconvenientes. Los vecinos aseguraron ayer que seguirán de cerca el curso de los acontecimientos, con la intención de solucionar la situación, antes que se inicie la temporada de lluvias copiosas, generalmente a partir del mes de septiembre.