Los recicladores se encuentran en “estado de alerta y asamblea” dado que no han percibido los 2.000 pesos prometidos y han detenido las ventas de los materiales separados por la pérdida del comprador. Transcurrido un mes del reclamo y corte en la rotonda de acceso a la ciudad, sobre Ruta 39, llevado a cabo por los trabajadores del basural Talita, pocas novedades se han observado incluso luego de haber comenzado una instancia de diálogo con las autoridades municipales.
“Nos encontramos en una situación de incertidumbre, por no tener respuestas concretas acerca del cobro de los sueldos, acordados en $2.000 y mucho menos del destino de las ventas de los materiales que separamos en la planta”, señalaron los trabajadores del lugar en un comunicado enviado a La Prensa Federal.
Sin plata y sin venta
“Desde hace 20 días que nuestra mercadería, la cual corresponde a un porcentaje importante de nuestro salario, está sin destino concreto por el retiro de quien fuera nuestro comprador y la falta de una nueva propuesta de comercialización.
En este sentido nos estamos organizando y contactando con empresas de la provincia, pero entendemos que sin el apoyo y el trabajo en conjunto con las autoridades municipales, difícilmente lleguemos a un acuerdo en lo inmediato, y nuestra situación amerita resolverlo pronto, ya que nuestras familias no cuentan con otro ingreso que el de nuestro trabajo, y ninguna familia puede mantenerse con $2.000 al mes, y mucho menos sin ellos”, indicaron sumamente preocupados los recicladores de Talita.
Alerta y asamblea
Por esta dura situación es que como primera medida “nos mantendremos en estado de alerta y asamblea, en espera de una respuesta sólida y mayor compromiso de las autoridades”. Además, los recicladores armaron una serie de puntos de reclamo a ser atendidos por la comuna, tales como la “firma del contrato por sueldos y cobro del trabajo realizado en mes de febrero; fecha de cobro de salario mes de febrero;
instancia de diálogo y negociación con nuevos compradores en conjunto con los funcionarios municipales; definición conjunta para elegir una cooperativa que nos permita trabajar hasta tanto conformemos una propia”, y finalmente los “monotributos sociales para poder gestionar obra social y recursos para los trabajadores, así como la entrega de ropa y materiales de seguridad e higiene por parte del municipio, y como compromiso asumido por este”, señalaron los recicladores de Talita en el comunicado enviado a esta redacción.