El partido entre Deportivo Roca y Cipolletti terminó con serios incidentes. Los futbolistas visitantes fueron agredidos por la parcialidad local. Video. 
La violencia en el fútbol argentino no distingue tiempos ni lugares y puede decir presente en el partido menos esperado, se trate de un partido con multitudes en las tribunas o de estadios casi desiertos.
El clásico entre Deportivo Roca y Cipolletti terminó igualado sin goles y más allá de las emociones y las polémicas que se produjeron durante los 90 minutos, nada hacía prever el bochornoso final.
Cuando los jugadores visitantes se retiraban hacia los vestuarios, los hinchas locales comenzaron a arrojar todo tipo de objetos contundentes y como muchas veces en el fútbol argentino, la diferencia entre que pase algo o no es la puntería de los lanzadores.
Primero cayó desplomado Jesús Vera, casi de inmediato Gustavo Del Prete. Los dos futbolistas de Cipolletti terminaron con heridas cortantes y fueron atendidos dentro del campo de juego.
El partido debía disputarse sin público visitante y sin embargo, hubo un grupo de simpatizantes de Cipolletti, clara muestra de que el operativo policial tuvo evidentes fallas que facilitaron los incidentes, más allá de la clara responsabilidad de los agresores. Para colmo, el presidente de Deportivo Roca, Jorge Escaris, declaró que los jugadores “estaban haciendo teatro” para que les suspendan la cancha, aunque luego sí repudió los hechos.