La serie de Netflix devino la opción para otra cara del cómic: personajes más humanos y oscuros. Hablan los actores Charlie Cox, Jon Bernthal y Elodie Young.
Hace unos días Ben Affleck dijo que su Daredevil aún le produce remordimientos. Hace tiempo que se muestra arrepentido por ese anodino superhéroe que encarnó y parece que la apuesta de la sociedad Marvel, la cadena ABC y Netflix (unidad que se forjó con una inversión de 200 millones de dólares y que suma 14 productores ejecutivos) que el viernes estrenó su segunda temporada volvió a abrir la herida artística del futuro Batman, que ahora ve una segunda oportunidad. Con un gran primer año los gigantes del cómic y la televisión vía streaming consiguieron lo que buscaban: la aprobación de los fans del cómic y que el boca a boca potenciara la serie de este justiciero ciego y a las que le vienen detrás, como el caso de Jessica Jones que (según datos extraoficiales, porque Netflix sigue sin dar a conocer sus números de audiencia) terminó siendo lo más visto de la compañía en 2015. “Parte de la política de no revelar información es lo que nos esfuerza a informarnos de otra manera. La idea es muy inteligente porque obliga a la gente a informarse por sí misma. No sabemos nada en términos de cuánta gente mira el show. Creo que, en el fondo, eso está bueno”, asegura Charlie Cox encargado de ponerle el cuerpo a este abogado ciego capaz de evadir la ley con tal de limpiar a Hell’s Kitchen de delincuentes.
Este año, mantiene el tono noir de la primera entrega, además de cuadros mafiosos, a la serie se le suman dos personajes icónicos de Marvel: el brutal Frank Castle, para The Punisher, interpretado por Jon Bernthal (ex The Walking Dead) que cree que Daredevil es “blando” en su tarea (algunos mencionan su tarea como un “homenaje” a Quentin Tarantino), y la femme fatale Elektra, una millonaria especialista en artes marciales con pasado común con el protagonista. Para este papel convocaron a Elodie Young que además de actriz es graduada en derecho en La Sorbonne y cinturón negro de karate.
—Impresionaste a todos desde tu primer casting. ¿Cuál creés que fue la diferencia entre vos y otros actores que buscaban el rol?
CHARLIE COX: No sé, no vi a los otros (ríe). Lo único que puedo decir es que para meterte por completo dentro de un superhéroe o antihéroe te olvidás del elemento humano de los personajes, y lo que hace el show es recordarnos constantemente, desde el punto de vista de los guiones y desde las actuaciones, que estas personas son muy humanas. Una de las cosas más emocionantes de la primera temporada es que tratamos de recordarle todo el tiempo a la audiencia lo vulnerables que son estas personas a las que les pasan cosas terribles y que si no son inteligentes o no tienen suerte, se van a morir.
—Ustedes entran en la segunda temporada. ¿Eso favorece o genera presiones extra?
JON BERNTHAL: No puedo decir mucho de mi personaje, porque parte del trato que firmamos con Netflix es que no podemos hablar demasiado porque tenemos que proteger al guión. Creo que eso es bueno para todos, así se sorprenden cuando lo vean… Soy un gran fan del show y es la primera vez que estoy en una serie tan increíble y exigente. La temporada uno dejó la vara muy alta. Nuestra esperanza es igualar o mejorar eso.
ELODIE YOUNG: No me genera presiones. Trato de entender a Elektra lo mejor que puedo, quiero honrar la esencia que el fan del cómic conoce. Lo disfruté mucho, por eso no siento presión. Sé que la gente se volvió loca cuando mencionaron que iba a parecer mi personaje y, aunque no soy lectora del comic, sé la repercusión que tuvo. Este es un gran show, aun si no estás inmerso en el mundo de los superhéroes, muchas cosas te pueden gustar… Cuando vi la primera temporada pensé que tenía similitudes con el cine asiático. Por ejemplo en Oldboy.
—Ben Affleck está por estrenar “Batman vs. Superman”, pero aún se lamenta de lo que hizo con “Daredevil”. ¿Qué te pasa cuando escuchás la comparación que hacen de tu interpretación y la suya?
C: No puedo manejar eso. La clave es ser auténtico. Tenés que hacer tu versión, lo que creas más cercano al personaje y ponerle tu mirada y energía. Tenés que confiar en eso y no alejar demasiado al personaje de vos.
*Desde Los Angeles.