Crece la fractura dentro del peronismo entrerriano

p2-8-2-16Nadie lidera el espacio con voz firme y de forma coherente, y muchas voces se acercan desde afuera para opinar y mover el avispero o hacer leña del árbol caído. Crece el malestar puertas adentro de la fuerza política. El gobernador Gustavo Bordet se encuentra en una encrucijada sobre el manejo del partido político que lo catapultó a ser el mandatario de Entre Ríos y sobre el cual siempre sobrevuela la figura de Sergio Urribarri y por fuera el goce y las ironías de Jorge Busti. En este marco el PJ próximamente deberá renovar autoridades nacionales y provinciales y el líder entrerriano debate su sentir respecto a la fuerza que representa y la necesidad de «coquetear» con el gobierno nacional para asegurar la gobernabilidad de una provincia con sus arcas vacías.

 

Definir puestos claves
«El justicialismo es un partido de gobierno. Cuando somos gobierno quien conduce es quien tiene el poder territorial, pero cuando somos oposición es diferente», argumentó Bordet sobre las elecciones internas que se vienen y reconoció que existen distintas posturas: «Hay un sector que piensa en adoptar políticas confrontativas, hay otro que plantea una especie de aggiornamiento y el gran sector mayoritario que plantea ser una oposición seria, responsable, que garantice gobernabilidad». Sobre quiénes podrían competir por la titularidad del partido a nivel nacional mencionó a Sergio Urribarri, al ex gobernador de San Juan, José Luis Gioja y al ex gobernador bonaerense, Daniel Scioli, a quien no desestimó pese a haber perdido el ballottage presidencial «porque estos son cargos partidarios». Sobre las elecciones en el plano provincial del 20 de marzo prefirió no manifestarse aunque será número puesto para dirigir los destinos.

 

Sinceramiento de los caudillos El diputado provincial y jefe de UPCN en Entre Ríos, José Allen de, dijo que «el partido tiene que normalizarse» y «hay que dar un debate previo a esa normalización, que está pendiente. No se trata de pelearnos, simplemente sincerarnos y plantear cuáles fueron nuestras responsabilidades para hacer una elección que no fue la que pensamos ante un rival débil», en alusión a las decisiones de Urribarri en las últimas elecciones nacionales. Allende dijo que la tarea del PJ en adelante es «convocar a toda la militancia a la normalización del partido, donde todos puedan presentarse y estar en igualdad de condiciones» porque «los personalismos son los que casi han hecho que este justicialismo se vea derrotado» y agregó que «acá tenemos que mirarnos bien todos los peronistas, porque sacando al gobernador todos somos militantes». Respecto al debate interno, planteó que hay una decisión que no tiene discusión posible: «Quien conduce al peronismo es el Gobernador de la provincia».

 

Busti coquetea con su retorno
Animal político de raza si los hay, Jorge Pedro no descansa en su afán de reinventarse y no quedar en el olvido. Y en este sentido aseguró que le han pedido que vuelva al PJ provincial pero el exgobernador dice no querer saber nada con regresar del partido que se fue por su pelea con Urribarri. Sin embargo, asegura que se «entusiasmaría» si De la Sota arma una lista a nivel nacional. «Yo personalmente no pienso volver al Partido Justicialista porque creo que no están dadas las condiciones como para que se dé una participación amplia, distinta. Está muy manejado el tema» dijo Busti sobre volver al partido en el cual fue electo tres veces para conducir la provincia. En la semana que el kirchnerismo tras muchos años tuvo una disidencia, con la fractura del bloque de diputados nacionales, y la conducción del partido llamó a internas para mayo, todo parece posible.