La modelo adoptó una chanchita vietnamita como mascota, y tuvo algunos problemas con entidades sanitarias.
Ayelén Paleo adoptó hace algunas semanas a Rubi, una chanchita vietnamita, como su nueva mascota, que convive con su perro Juancho y su bulldog francés.
La modelo suele subir decenas de fotos retratando su vida en las redes sociales, en las que por supuesto incluye al animalito, lo que le trajo un contratiempo con autoridades sanitarias, según contó Mercedes Ninci en El Diario de Mariana.
En efecto, Paleo tuvo que entregar al animalito para que le hagan varios análisis, y estuvo muy preocupada y triste por la separación, lo que también dejó constatado en las redes.
Por suerte, la separación ya llegó a su fin, y la pequeña Rubi ya volvió a los brazos de su dueña, que este año forma parte de “Segunda Vuelta”, el espectáculo teatral que presentan Nito Artaza y Miguel Ángel Cherutti en Mar del Plata. Por supuesto, la chanchita acompaña a Ayelén en todo momento.