3er Domingo de Adviento
«Yo envío mi mensajero para prepararte el camino» . (Mt.11, 2-11 ). En este tercer domingo de adviento, preparando la Navidad, la figura emblemática es la de Juan Bautista, el precursor de Jesús, que fue enviado a preparar el corazón de su pueblo para la venida del Salvador. Juan, encarcelado por Herodes por decirle la verdad, mandó a dos discípulos suyos a preguntarle a Jesús si era El el Mesías. o tenían que esperar a otro. Juan tenía clara su misión: preparar el camino al Mesías, y quería cerciorarse de haberla cumplido. Jesús no le responde con una afirmación de palabra, sino que ellos mismos lo descubrieran en las obras que hacía, obras que el Profeta Isaías indica como signos de la presencia del Mesías: «los ciegos ven, los paralíticos caminan, los sordos oyen, los muertos resucitan y la Buena Noticia es anunciada a los pobres». Como todo esto lo estaba realizando Jesús, era signo evidente de que El era el Mesías esperado.
Luego Jesús se dirigió a la multitud para dejar bien claro quién era Juan Bautista, citando nuevamente a Isaías:»es aquel de quien está escrito: yo envío mi mensajero delante de ti, para prepararte el camino». Y Jesús elogia a Juan con dos afirmaciones contundentes: «es un profeta, y más que un profeta»; y luego: «les aseguro que no ha nacido ningún hombre más grande que Juan el Bautista». Esto no solo por la misión que le fue encomendada por Dios, sino por su total entrega y dedicación a la voluntad de Dios, en medio de la mayor austeridad. También nosotros tenemos la misión de anunciar la presencia del Salvador, preparándole ante todo el camino para que se halle «a gusto» en nuestra vida, y ayudando con nuestro testimonio a que también lo hagan los demás. La figura de Juan Bautista nos exhorta a imitarlo en esa coherencia y confianza plena puesta en Dios, y en su Hijo Jesús, nuestro Salvador esperado. No es fácil la coherencia, sobre todo cuando nos exige renuncias y cuando nos incomoda, pero nuestra confianza, es decir nuestra Fe en un Dios que vino a compartir su vida con nosotros, nos fortalecerá para lograrlo.Acrecentémosla en este tiempo, para preparar el camino a Jesús que vino a compartir su vida con nosotros. Bendiciones y paz, esperando al Señor que viene. Parroquia Santa Teresita.