Hasta el miércoles, en el hall del Auditorio Scelzi, la comunidad puede asistir a la exposición fotográfica sobre pasado y presente de los Centros Municipales de Desarrollo de la Niñez.
La Secretaría de Desarrollo Social y Educación, a través de la Dirección de Educación, inauguró este lunes la muestra de fotos de los seis Centros Municipales de Desarrollo de la Niñez, que puede visitarse de 10 a 12 y de 17 a 19 horas en el Auditorio Municipal “Carlos María Scelzi”. Participaron de la inauguración la secretaria, Marianela Marclay, y la directora de Educación, Graciela Guerrero.
En el hall del lugar, la ciudadanía uruguayense puede disfrutar -hasta este miércoles- de un recorrido de casi 50 años de los Centros. Se dispone de material fílmico, fotográfico, actas y más, que se extienden desde el año 1975 hasta hoy en día, dando a conocer la trayectoria de los distintos Centros, desde su fundación como guardería hasta su funcionamiento actual, que se encargan del cuidado y educación de niños y niñas desde los 45 días hasta los 3 años.
Participan con material, los Centros Municipales “Tuiti”, creado en marzo de 1996; “Sirirí”, de octubre de 1987; “Tortuguitas”, de marzo de 1993; “Mi Casita”, de abril de 1981; “Pastorcito”, de mayo de 1984; y “Pelusín”, el más antiguo de todos, inaugurado en diciembre de 1975.
Los Centros
En los CMDN se busca proporcionar a los niños/as de 45 días a 3 años las condiciones ambientales y afectivas; pedagógicas y asistenciales que garanticen su desarrollo integral. Se considera un marco de cuidado cariñoso y sensible para el desarrollo de la primera infancia, describiéndose como aquello que la niña y el niño necesita para poder alcanzar su potencial de desarrollo cognitivo, emocional, social y físico. Esto es proporcionado por las familias, los cuidadores primarios, los referentes afectivos influenciados por la comunidad en donde viven y por las políticas y decisiones de los gobiernos.
Se trabaja hasta los primeros 3 años y continúa en las siguientes etapas de la infancia; dado que es el período más sensible a las experiencias positivas o negativas y sienta las bases del desarrollo integral, de la salud, el aprendizaje y el comportamiento.
Es oportuno, porque debe proveerse en el momento adecuado a cada etapa del desarrollo, sin antecederse ni demorarse. Implica al interés superior ya que se basa en lo que necesitan las niñas y los niños, como experiencias enriquecedoras, diversas, recíprocas y para el abordaje del desarrollo infantil.