El presidente de la institución planifica el «operativo seducción» para que el volante campeón del mundo con la Selección Argentina se ponga la camiseta azul y oro tras finalizar su contrato con la Roma de Italia.
La vuelta de Leandro Paredes a Boca cada vez toma más color. Es un tema que desde hace rato está instalado por las declaraciones del propio jugador, pero que ahora efectivamente se metió como una prioridad en la agenda de Juan Román Riquelme por el sueño que sería tener al volante campeón del mundo nuevamente en el club que lo vio nacer. ¿Cuándo? El plan es que se ponga la camiseta azul y oro a mediados del 2025, una vez que finalice su contrato con la Roma.
De cuna xeneize y fanático empedernido, algo que quedó en evidencia -entre otros ejemplos- cuando llegó al amistoso de la Selección Argentina ante Guatemala viendo el partido de Boca contra Vélez y también con la mítica cábala de los caramelos (Rodrigo De Paul reveló que come siete caramelos, cuatro azules y tres amarillos), el talentoso mediocampista de la Scaloneta dijo recientemente que no se pone plazos pero que su anhelo es volver en plenitud. Y todo indica que hay muchas chances de que así sea.
Con Riquelme a la cabeza, obviamente por su condición de presidente pero en este caso en particular sobre todo por el lazo de amistad que lo une con Paredes (compartieron plantel en los inicios del nacido en San Justo), en Boca ya trabajan en el operativo seducción para que el ansiado retorno sea en el corto plazo.
De hecho, el miércoles dijo presente en uno de los palcos de La Bombonera -como cada vez que está en el país- para alentar al equipo contra Independiente del Valle, recibió un reconocimiento y se encontró con Román, que no debe haber dejado pasar la oportunidad para refrescar este asunto que lo ilusiona como pocos.
A sabiendas de que su vínculo con la Roma caduca a mitad del año que viene, el objetivo es justamente repatriarlo en ese momento, con el factor clave de que así llegaría con el pase en su poder e implicaría que el conjunto de la Ribera se ahorre la compra de un pase inviable para los valores que se manejan en el fútbol argentino.
«No me puse fecha, no me pongo fecha para nada en mi vida. Trato de vivir mi vida y mi carrera día a día y lo que tenga que pasar, pasará. Las ganas de volver a Boca siempre están, ya lo dije, pero no me pongo fecha», reconoció Paredes en una entrevista con TyC Sports en abril.
«Riquelme me dijo que quiere que vuelva antes que se vaya, pero seguramente estará muchísimos años en el club; la gente está contenta con lo que está haciendo», concluyó.
En una de sus últimas entrevistas, particularmente con el canal de streaming Olga, el volante central agregó que le gustaría llegar a La Bombonera ni más ni menos que junto a Paulo Dybala: «Lo estoy volviendo loco a Paulo, lo quiero traer conmigo, pero se me va a hacer difícil. Él salió de Instituto y no sé si quiere volver a jugar a Argentina. Vimos juntos la final de la Libertadores en casa. Mi hijo se puso a llorar y le dije que se quede tranquilo que papá iba a volver con el tío Paulo. Se río».
A finales del año pasado, Paredes ya había soltado la chance de que la Joya juegue con el conjunto de la Ribera, hasta descartando la posibilidad de que lo haga en River. Es que cuando Dybala estaba en la Gloria, transitando la B Nacional, previo a un choque frente al Millonario, reveló que simpatizaba por el Xeneize.