El equipo argentino en su modalidad visual estuvo entrenando en nuestra ciudad.
La cuenta regresiva llegó a su fin para el atletismo adaptado. La cita es en el Estadio Charléty de París, Francia, desde el 8 al 17 de julio. Allí se disputará el Campeonato Mundial de Paraatletismo y Argentina se hará presente con una nutrida delegación.
Esta semana se realizó, en las instalaciones del CEF Nº 3 y en otros sectores de la ciudad, la concentración de la selección argentina de atletismo adaptado en su modalidad visual para la cual fue convocada a entrenar la atleta Brisa Roldán junto a su entrenadora, la profesora Andrea Cabandié.
Así se fue armando una excelente concentración con los atletas que ya han viajado al mundial.
El atletismo adaptado se incorpora como disciplina en el año 2003 con el renacimiento de los Juegos Nacionales Evita y comprende al conjunto de competencias de velocidad modificadas para posibilitar la participación de deportistas con discapacidad.
Las primeras competiciones oficiales para atletas con discapacidad tuvieron lugar en 1952, en la ciudad inglesa de Stoke Mandeville. Allí se realizaron las primeras carreras para deportistas en sillas de ruedas marcando un hito en el deporte adaptado internacional.
Asimismo, el atletismo forma parte del programa paralímpico desde la primera edición de los Juegos Paralímpicos de Roma 1960 y durante los últimos 20 años se ha consolidado como una de las disciplinas más extendidas, ya que se practica en más de 120 países.
Los atletas se dividen de acuerdo a su capacidad funcional y pueden competir en sillas de ruedas y con prótesis. Los deportistas con discapacidad visual pueden estar acompañados por una persona-guía que podrá correr a su lado unido por una cuerda.
Este deporte es regulado por el Comité Paralímpico Internacional (IPC) y la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF).