El comisario Lucio Villalba, titular de la Jefatura Departamental de Policía, aclaró que la dependencia no abalará «ningún tipo de actuación que se aleje de lo que marquen las normas de acción». Puntualizando que la presunta golpiza realizada a una persona no vidente en el interior de la Comisaría 4°,
«no es una práctica abalada por esta Jefatura, sino que todo lo contrario». Por ese motivo, más allá de la investigación de la Justicia ordinaria, la fuerza ya inició un sumario para llegar «hasta las últimas consecuencias» y que en caso de confirmarse la veracidad del hecho informado por Diario Río Uruguay, «él o los responsables de este grave hecho recibirán las sanciones que correspondan».
Tal como se precisara este lunes, un hombre no vidente de 36 años e identificado como Saúl Ledesma, denunció haber sido golpeado por un grupo de policías -de la comisaría 4°- que llegaron incluso a colgarlo de las rejas con las esposas y tenerlo detenido en esa forma por cerca de 10 horas. Ledesma narró a Diario Río Uruguay que los uniformados se lo llevaron luego de haber mantenido una discusión con su hermano. La investigación ya está siendo llevada adelante con el fiscal Mario Guerrero.
En ese contexto, el profesor Rubén Bonelli, titular de la Delegación Concordia de la Subsecretaría de Derechos Humanos se reunió con el comisario Lucio Villalba, quien subrayó su interés y compromiso en que se investigue hasta las últimas consecuencias, y que «él o los responsables de este grave hecho recibirán las sanciones que correspondan». Desde la Jefatura se aseguró que se iniciaron los sumarios administrativos que correspondan, dejando primero a la Justicia que investigue para esclarecer el caso. Tanto Villalba como Bonelli coincidieron en destacar que desde hace un tiempo se habían dejado de producir situaciones de apremios ilegales en la policía, y que lo denunciado por Ledesma, representa «lo peor y más aberrante de las fuerzas de seguridad que queremos desterrar para siempre».