Ocurrió anoche en un establecimiento ubicado a la altura del kilómetro 4 de la ruta provincial 23, en la zona rural de Caseros. La Prensa Federal accedió a imágenes que dan cuenta de las pérdidas millonarias como consecuencia del siniestro.
Bomberos Voluntarios de San Justo, Caseros y Pronunciamiento trabajaron intensamente para contener las llamas, pero las consecuencias fueron inevitables. Hasta el momento se desconoce cómo pudo haberse desencadenado el incendio.
Además, el productor afectado por el incendio, Adrián Sosa, manifestó “lo desesperante pudo haber sido el escuchar a esos pobres animales que se quemaron vivos, pero habrá que cerrar los ojos y seguir”.
Asimismo, el productor porcino comentó que el incendio pudo haberse generado a raíz de un cortocircuito en alguna parte de las instalaciones. “Se realizan los peritajes y hay electricistas recorriendo el resto de los galpones”, acotó al confesar: “Lamentablemente tienen que pasar estas cosas para que uno entienda y tome otras precauciones”.
En la oportunidad, Sosa se mostró “positivo” pese a las pérdidas millonarias que causó el incendio. “Las pérdidas son por un monto bien interesante, pero lo importante es que el fuego no afectó al plantel de madres porque eso hubiera complicado mucho más el trabajo”, explicó.
Por otra parte, destacó que no se registraron personas lesionadas a causa de las llamas. “Los caseros estaban durmiendo y cuando despertaron, porque los galpones están alejados, el fuego ya había tomado la mitad de las instalaciones y las llamas se propagaron muy rápido”, comentó al repasar que cuando él llego “el fuego estaba muy avanzado y los animales estaban todos muertos”.
Sosa hace 18 años que se desempeña en el rubro y de acuerdo a lo que comentó, la producción porcina es para abastecer al consumo interno en el departamento Uruguay.
“La parte positiva es que fue una desgracia con suerte porque los bomberos estuvieron muy bien, actuaron rápido y, entonces, los otros galpones se salvaron. Será cuestión de cerrar los ojos y darle para adelante y seguir”, valoró Sosa.
Y agregó: “Todo es parte del juego del que hace cosas y corre con riesgos. Esta vez nos tocó una mala suerte, pero habrá que afrontarla porque dentro de todo no fue de gravedad, no se lastimó nadie y no les pasó nada a los trabajadores que se desempeñan en el criadero”.
Bomberos Voluntarios de Caseros, San Justo y Pronunciamiento trabajaron intensamente para contener las llamas, pero las consecuencias fueron inevitables.