Según informaron la mujer, de unos 50 años, estaba realizando trámites por una denuncia en
fiscalía y al no ser atendida con la premura que demandaba decidió retirarse al baño. Allí se
roció con combustible, luego volvió a las oficinas de fiscalía y se prendió fuego.
A pesar de la intención que tenía, los presentes en el lugar lograron apagar las llamas y salvar a
la mujer. Aunque resultó con algunas quemaduras. Testigos presentes en el lugar informaron
que la señora se encontraba emocionalmente alterada, ya que atraviesa por una situación
compleja.