Este lunes, la ex Gobernadora de la Provincia de Buenos Aires y hoy Diputada Nacional por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, estará en Paraná acompañando a otro porteño, el otrora legislador de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y hoy Diputado Nacional por Entre Ríos, Rogelio Frigerio.
Lo paradójico de esto es que lo hará en la sede de una Universidad Pública, la UADER. Como a veces la memoria nos juega una mala pasada, bueno es recordar los dichos vertidos por María Eugenia Vidal cuando siendo Gobernadora expresó: “¿De qué sirve llenar la provincia de universidades públicas cuando todos sabemos que nadie que nace en la pobreza llega a la Universidad?”.
Causó tristeza oírle decir esas palabras en aquel momento, pero más tristeza sigue causando que las piense. En el artículo 4º inciso e) de la Ley de Educación Superior Nº24.521, se establecen como objetivos el “profundizar los procesos de democratización en la Educación Superior, contribuir a la distribución equitativa del conocimiento y asegurar la igualdad de oportunidades”.
Porque la educación universitaria había sido durante muchos años el reflejo de un Estado que se despreocupó de la Justicia Social, del padecimiento de una crisis ética que permitió y a veces todavía permite justificar ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda, con una desigual dignidad, derechos y beneficios; entre 2003 y 2015 se sancionaron 19 leyes que establecieron la creación de 17 universidades nacionales, posibilitando que todas las provincias del país tengan al menos una universidad nacional en su territorio.
De esas 17 nuevas universidades nacionales, 9 se crearon en la Provincia de Buenos Aires, el distrito más poblado del país. Sin embargo la señora Vidal sigue pensando que nadie nacido en la pobreza puede llegar a la Universidad.
Repudio
Al asumir juré por la memoria de mi mentor el Padre Atilio Rosso, por eso me veo en la necesidad espiritual y moral de manifestarme y seguir repudiando con vehemencia pero también con respeto, pensamientos como los de la actual Diputada Nacional que nos visitará en el salón del Rectorado de la UADER.
Porque entiendo que la educación se sigue presentando como una oportunidad de liberación del ser humano, hago mías las palabras de Atilio: “La intelectualidad Argentina no ha tenido la claridad para entender las claves de la esclavitud de los pobres, ni tuvo el coraje de afrontarlo desde una visión de futuro de país que los incluya. Tenemos que buscar un camino en el mundo pobre, y con todas las críticas que se pueden hacer a este proceso educativo, lo urgente es habilitar hoy a este ser humano y que desde esa capacidad él entre en un proceso educativo formal, metodizado. Los argentinos debemos descubrir que nuestro futuro como Nación depende de la forma en que resolvamos nuestra inserción en el mundo del conocimiento, donde la economía se basa casi exclusivamente en la innovación tecnológica y la capacitación de los recursos humanos”.