El guionista y escritor uruguayo, que desempeñó su carrera actoral en nuestro país, falleció hoy a los 59 años. 
José Palazzo, productor de los shows que la banda Casi Justicia Social, liderada por el ex Callejeros Patricio Fontanet, desmintió que el local donde dieron un show en la ciudad de Paraná haya tenido una concurrencia de 3.000 personas cuando estaba habilitado para 1.500.
“CJS hizo su concierto con contrato y a mí me entregaron los papeles con las habilitaciones y todo en regla… y con las capacidades de 3.000“, escribió Palazzo en Twitter.
“Barbaridades dice la Municipalidad de Paraná, nadie intentó clausurar nada y no entraron niños al lugar… y solo fue gente de tránsito”, agregó.
Recordemos que según la intendenta de la ciudad entrerriana, Blanca Osuna, inspectores municipales trataron de frenar el espectáculo, pero no pudieron, ya que los organizadores hicieron caso omiso al pedido. “Esto fue una acción irresponsable”, dijo.
El local fue clausurado este martes, y la intendenta inició acciones penales contra los organizadores del recital y los titulares de la habilitación municipal sobre el lugar donde se realizó. “Estamos adoptando medidas en relación a una clara contravención a las normas de seguridad que hubo en este local comercial el domingo por la noche cuando tocara la banda Casi Justicia Social. Hay una responsabilidad del Estado que nosotros vamos a ejercer”, afirmó la jefa comunal.
Por otro lado, el diario Uno de Entre Río publicó una copia del contrato, donde se especifica que la capacidad del lugar era para 1.500 personas.
Por otro lado, familiares de víctimas de la tragedia de Cromañón denunciaron a Fontanet por el recital. El abogado de los familiares, Patricio Poplavsky, presentó el escrito en la Sala III de Casación, tribunal que debe revisar las condenas a Fontanet, el resto de los músicos de Callejeros y los otros acusados por la tragedia de Cromañón, que provocó la muerte de 194 personas.
“Evidentemente continuar realizando este tipo de recitales donde se hace ingresar más público del permitido, convocando por vías alternativas a fin de evitar los controles judiciales, no hace más que demostrar que se tiene conocimiento de lo no permitido, sin importar la vida o la salud de las personas (en este caso sus seguidores)”, sostiene el escrito al que accedió DyN.
