El director de Recursos Naturales de Entre Ríos brindó detalles del alcance de la norma. Está permitido cazar liebre, perdiz chica o común y patos, pero solo en algunas zonas de la provincia. La cantidad es limitada y hay requisitos.
El gobierno entrerriano dispuso el período y las condiciones en que este año se llevará adelanta la Caza Deportiva Menor.
La etapa comenzó días atrás y se extenderá hasta mediados de agosto. El director de Recursos Naturales de Entre Ríos, Mariano Farall, confirmó que «el período se establece anualmente y en esta ocasión, a través de la Resolución 1099, hemos habilitado una ventana de tiempo específicamente para la Caza Deportiva Menor, que inició el 14 de mayo y finalizará el 15 de agosto de 2022. Este instrumento legal está enmarcado en la Ley Nº 4841, que es nuestra Ley de Fauna, pero habitualmente conocida como Ley de Caza, ya que introduce la posibilidad de aprovechar algunas especies para ciertas actividades -como la caza-, siempre desde un concepto ecosistémico».
Al momento de referirse a las especies posibles de cazar en este período recientemente habilitado, el funcionario detalló: «Encontramos la liebre, la perdiz chica o común y patos. Puntualmente se contempla al Pato Picazo, Pato Sirirí Pampa, Pato Sirirí Colorado y Pato Capuchino».
Señaló que determinar las especies alcanzadas no es azaroso, sino que «se decide en conjunto con la entidad nacional de fauna, que es el ECIF (Ente Coordinador Interjurisdiccional de la Fauna). A partir de los informes obtenidos por los monitoreos que se realizan, se hacen reuniones para definir las temporadas, en base al comportamiento que están teniendo cada una de las poblaciones. Con ese fundamento se establece cuántas piezas puede cazar cada cazador en una excursión».
Por excursión y por cazador, se permiten este año: 4 liebres, 9 perdices chicas, 6 patos picazo y 3 ejemplares de cada uno de los otros patos permitidos. «Indistintamente, en sumatoria no se pueden cazar más de 6 ejemplares. Para este 2022, se disminuyó la cantidad de anapios permitidos en relación al año anterior, porque a través de los muestreos que realiza la Dirección de Recursos Naturales se ha advertido que las lagunas del Delta estaban mayormente secas. Ahora ha entrado un poco de agua, pero la bajante ha afectado el hábitat de esta especie. Por eso se redujo la cantidad». Asimismo, la Resolución vigente prohíbe estrictamente la caza deportiva menor de cualquier otra especie silvestre que no haya sido expresamente permitida.
Las excursiones de caza “deberán efectuarse los días sábados, domingos y feriados, vísperas o posteriores al feriado”.
Farall comentó a Fm Estación Plus que «en cuanto a las armas a utilizar, hay requisitos establecidos a nivel nacional. En principio, no cualquier persona puede tener un arma, sino que tiene que estar correctamente habilitada a través del Registro Nacional de Armas. Hay legislación provincial y específicamente hay determinados calibres a emplear para este tipo de actividad».
Pero un arma no es lo único necesario para ejercer la Caza Deportiva Menor, sino que la requisitoria es aún más amplia. Así lo reveló el director provincial: «El cazador tiene que tener el Permiso de Caza, que se gestiona en los diferentes Puestos Camineros de la Policía de Entre Ríos, ubicados en los accesos a la provincia -como Brazo Largo, Victoria ó el Túnel Subfluvial-. Lo propio se puede tramitar en la Dirección General de Fiscalización, con oficina en España 33 de la ciudad de Paraná. A los residentes se les otorga un permiso anual, que ronda los $1.000; y a los no residentes se les otorga un permiso transitorio, que tienen un costo aproximado de $660, siendo utilizados -por ejemplo-, para una excursión de fin de semana; y el permiso a extranjeros, tiene un valor superior a los $4.000. Están correctamente regulados y hay que reunir las condiciones para ejercerlos».
Por otra parte, Farall indicó que «la práctica de la Caza Menor conlleva una Hoja de Ruta, la que se encuentra ligada a la autorización del propietario del campo o inmueble donde se va a realizar la actividad deportiva» y agregó: «Obviamente que está sujeta a horarios diurnos y respetando la convivencia con los moradores que han dado el consentimiento. Existen también establecimientos rurales específicamente habilitados para el Turismo Cinegético, que es la denominación que reciben estas prácticas. Se dedican a guiar y ofrecer espacios para estas ‘cazas pluma’, siendo sólo habilitados por nuestra Dirección».
La Caza Deportiva Menor habilitada es sectorizada, ya que la geografía entrerriana no presenta en toda su extensión las mismas condiciones para los ejemplares aludidos. En relación a ello, el director precisó: «Está absolutamente prohibido cazar en las Áreas Naturales Protegidas y en la superficie de la Reserva de Salto Grande. Está totalmente vedada en los departamentos Paraná, Diamante, Federal, Concordia, Colón, San Salvador e Islas del Ibicuy. Sí es posible en partes de los departamentos Nogoyá, Gualeguay, Gualeguaychú, La Paz, Villaguay y Victoria».
«Las Brigadas de Abigeato son las que están facultadas con el poder de Policía para el control de todas las condiciones inherentes a la Caza -tanto mayor como menor- y son quienes auxilian a los organismos de Fiscalización y a la Dirección de Recursos Naturales para garantizar el cumplimiento de las normativas. Las mismas no son más que medidas necesarias para no afectar el medioambiente y en especial, el ciclo de vida de la fauna», sostuvo el funcionario provincial.
Con la mirada puesta en la situación actual y la proyección posible de realizar sobre las poblaciones de aquellas especies referenciadas, Mariano Farall analizó: «Si bien la Liebre Europea es una especie introducida, ya está habituada a nuestros campos y estaremos tratando de cuidar cada vez más su presencia en la zona. Muchas especies son migratorias, nativas y por eso desde la Dirección de Recursos Naturales estamos en permanente contacto con otras provincias e incluso con la República Oriental del Uruguay, para intercambiar los monitoreos y así regular cada vez más este tipo de actividades. Cuanto más afinada esté, mejor estaremos cuidando a estas especies y lograremos que se mantenga su presencia a través del tiempo».
El profesional no desconoció que en tiempos de economía apremiante, resulta más complejo poder concientizar, pero enfatizó: «La Provincia de Entre Ríos no permite la caza comercial de liebres ni perdices. Sólo se permite la caza deportiva menor y en los valores más bajos que hemos tenido respecto de la cantidad de piezas. Por otra parte, no hay acopios registrados -como existen en otras provincias-, precisamente por estar absolutamente prohibida la caza comercial», concluyó.