Como se había anticipado desde este mismo medio, la mayoría automática convalidada en términos políticos por las últimas elecciones, con más del 50 por ciento de los sufragios, que ostenta el Ejecutivo en el Concejo Deliberante, dio curso a las modificaciones introducidas al proyecto turístico integral. En realidad, no se hizo otra cosa que borrar con el codo lo escrito hace un año con la mano, cuando en medio de una arremetida comunitaria contra el proyecto original de la administración Bisogni, Carlos Schepens resolvió el contrato con Entretenimientos de la Costa por múltiples incumplimientos.
Lo correcto hubiera sido llamar nuevamente a licitación, pero se eligió el camino más corto. Los cercanos al cuerpo legislativo, señalan al bloque oficialista como el lugar donde ha terminado derivado gran parte de la tensión social por el asunto, pero nadie ignora que el momento de apretar el acelerador es ahora, con la oposición madurando el nocaut y la usina de medios, a lo sumo, ignorando el tema.
Sobre los errores de forma y fondo que mantiene la iniciativa se ha escrito mucho, pero en la sesión que terminó otorgando luz verde a la nueva instancia, hubo algunas cuestiones, al menos exageradas. Allegados al oficialismo, que no acuerdan con la presencia policial en el recinto de sesiones, se molestaron con la treintena de efectivos, muchos de ellos de civil, apostados en los accesos y laterales de un lugar donde no había más de un centenar de personas perfectamente identificadas.
En el bloque oficialista se corrió la voz que había posibilidades de que los vecinos autoconvocados arrojaran algún elemento contundentes sobre los ediles, cosa realmente incomprobable y, en cualquier caso, muy fácil de solucionar desde la acción política, donde suelen cruzarse prácticas similares que elevan la tensión, pero nunca pasan a mayores. Cantar la marcha peronista al cierre de una sesión en la cual resultó dificultoso encontrar gente «combatiendo al capital», fue una muestra cabal de lo que se jugaba en la instancia.
Quizá por eso, que la policía haya terminado garroteando, a metros del recinto, a un militante político que ha desarrollado esa actividad desde su adolescencia, no hizo más que poner en blanco sobre negro que la mayoría no alcanza en estas circunstancias, porque las ideas suelen defenderse con militancia, si es necesario. Si hacen falta civiles de pelo cortito y pocos modos -que en realidad deberían custodiar al vecindario atendiendo consignas de real peligrosidad-, es porque el temor nos está ganando la batalla.
Busti repudió amenazas a su concejal
En el encuentro realizado ayer, el ex mandatario provincial repudió las agresiones y amenazas que recibió la concejala de nuestra ciudad, Mónica Miletich, por parte de militantes del oficialismo e instó a que «se respeten los derechos de pensar distinto, que en definitiva es parte fundamental de la democracia».
El hecho aconteció al término de la sesión donde el oficialismo aprobó la ordenanza que autoriza el Proyecto Integral Turístico. Al respecto, Busti valoró la conducta de Miletich «que escuchó el reclamo de sus vecinos y con su voto por la negativa, intentó defender el sentir mayoritario de la ciudadanía».
Rebautizan el FEF para alinearlo a Massa
Se realizó ayer un plenario provincial de Unión por Entre Ríos, pero en esta oportunidad sólo se juntaron los dirigentes del ala peronista.
El encuentro fue dirigido por el ex gobernador Jorge Busti, aunque estuvieron presentes también Luis Leissa y Raul Vergara. Lo fundamental resultó la modificación del nombre del Frente Entrerriano Federal, partido que constituyó el ex gobernador allá por el 2010 para participar de las elecciones provinciales por fuera del PJ.
Busti, consideró que era necesaria «una propuesta superadora para empezar a institucionalizar esta idea y ser una alternativa al kirchnerismo en el 2015», evidenciando que el espacio que logró posicionarse como segunda fuerza en la provincia, competirá en dicho año bajo la denominación partido Frente Renovador Unión por Entre Ríos
Quien ocupó un rol protagónico en el armado territorial de UPER, había adelantado que en el encuentro se hablaría del futuro próximo del sector peronista, el cual «vemos como entrerrianos y militantes sociales y políticos con grandes expectativas y la gran responsabilidad de representar a todos aquellos que han depositado en nosotros su confianza mediante el voto».