La portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti; el ministro de Desarrollo Social, Juan Zabaleta; el gobernador bonaerense, Axel Kicillof; e integrantes del bloque de diputados del Frente de Todos cuestionaron este lunes las declaraciones del expresidente Mauricio Macri sobre el destino que tuvo el endeudamiento con el FMI y calificaron a ese préstamo como «autoritario», «irresponsable» y destinado a beneficiar a «una casta financiera».
«Macri solo sigue confirmando con sus declaraciones que tomó una deuda irresponsablemente, arbitrariamente, solo para su beneficio político, y también para el beneficio económico de sus amigos y del grupo financiero, de alguna manera de la casta financiera; si hay alguna casta en este mundo más que la casta política, es la casta financiera», dijo este lunes Cerruti.
La portavoz del Gobierno respondió así a las declaraciones del expresidente Mauricio Macri, quien el domingo dijo en CNN que «la plata del FMI la usamos para pagar a los bancos comerciales que se querían ir porque temían que vuelva el kirchnerismo».
A su vez, los integrantes del FdT de la Comisión Bicameral de Seguimiento y Control de la Gestión de Contratación y de Pago de la Deuda Exterior sostuvieron que el exmandatario dejó «en claro el carácter profundamente político del préstamo» que «no hubiera existido de no haber sido por la voluntad del entonces presidente de los Estados Unidos»., en referencia a Donald Trump.
Además, mencionaron que Macri «desmiente a quienes se esforzaron por negar la existencia de una relación directa entre el proceso de endeudamiento externo y la sostenida fuga de capitales que se vivió en el país entre los años 2016 y 2019» porque el ex presidente, indicaron en un comunicado, «afirma con todas las letras que el dinero proveniente del FMI se usó para financiar la salida del país de los capitales especulativos que habían ingresado para aprovechar las altísimas tasas de interés en pesos establecidas por su propio Gobierno».
«Estos bancos y fondos de inversión tomaron la decisión de retirarse debido a que el riesgo de mantener sus posiciones en pesos era muy alto, ante el agotamiento de las políticas ruinosas implementadas por el gobierno de Cambiemos», sentenciaron los senadores y diputados del FdT.
Por su parte, el ministro de Desarrollo Social, Juan Zabaleta, consideró que los argentinos «no quieren volver atrás» y advirtió que «la oposición sigue pensando que si en un momento hay que endeudar al país para beneficiar a cuatro o cinco amigos, o volver a imponer tarifazos y endeudar jubilados, lo va a hacer».
«El 14 de noviembre los argentinos y argentinas tienen que primero ir a votar y luego mirar para adelante porque no vamos a tolerar que la oposición ponga palos en la rueda y juegue todos los días con el futuro del país que tanto cuesta construir», afirmó el exintendente de Hurlingham, en declaraciones a Radio 10.
En tanto, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, aseguró que el expresidente Mauricio Macri «confesó que lideró el más veloz y catastrófico proceso de endeudamiento de la historia argentina», cuando el domingo reconoció que el préstamo de 45 mil millones de dólares que recibió del FMI en 2018 se utilizó «para pagarle a bancos comerciales».
En declaraciones a FM Futurock, el mandatario provincial dijo que se siente «indignado» por los dichos del exjefe de Estado respecto al destino de los fondos que el organismo multilateral le otorgó a la administración de Cambiemos.
En ese sentido, Kicillof analizó: «Usaron (el dinero) para la fuga de capitales, se endeudaron los dos primeros años con el mercado privado en 100 mil millones de dólares, luego les cerraron la canilla. Ahí no podían ni devolver lo que habían tomado prestado durante su gobierno y tuvieron que volver al Fondo para dejarle la salida abierta a los fondos de inversión que habían venido a especular a la Argentina».