En audiencia a puertas cerradas el Juez de Garantías N° 2 Gustavo Díaz hizo lugar al pedido de la fiscal Albertina Chichi, y dispuso las medidas de coerción personal para el joven del Barrio 30 de Octubre de nuestra ciudad. Está imputado provisoriamente del delito de abuso sexual simple, cuyas víctimas son dos niñas menores de edad.
Se efectuó la primera audiencia en relación a la causa que conmocionó públicamente a nuestra ciudad, no sólo en relación al delito cometido por el joven imputado sino además por los hechos de violencia que ocurrieron en su vivienda el pasado 18 de octubre.
En la misma se trató el pedido de la fiscal Albertina Chichi en relación a la imposición de medidas de coerción personal- reglas de conductas de cumplimiento estricto- por el término de 90 días. Se trata de la fijación de un nuevo domicilio en la ciudad, que no podrá ser aquel en el cual vivía; la prohibición de acercamiento a las víctimas o familiares de las mismas en un radio de 200 mts.; y de abstenerse de ejercer actos amenazantes en contra de las mismas.
Si bien la causa penal se encuentra en su etapa inicial de investigación, la fiscal ha realizado diferentes diligencias para recolectar pruebas que puedan sostener la imputación formulada oportunamente. Entre ellas se destacan: la solicitud inmediata de medidas de protección a las víctimas una vez efectuada la apertura de causa; el allanamiento practicado en la vivienda del acusado; y la declaración de las víctimas menores de edad bajo el sistema de Cámara Gesell, donde confirmaron los hechos denunciados.
Es importante mencionar que la defensa técnica del imputado está a cargo del abogado particular Jair Gay. En los próximos días se constituiría como querellante el abogado José Pedro Peluffo, en representación de una de las familias denunciantes.
La investigación se hace en total reserva y cuidado en protección de las niñas víctimas de este tipo de delito. La fiscal conjuntamente con el Ministerio Público Pupilar, buscarán como representantes del Estado preservar la integridad física, psíquica y moral de las mismas en todo el proceso penal. Fuente La Pirámide