El cachorro de lobo marino había sido encontrado en la zona costera del balneario de Paysandú, en Uruguay. Presumen que nadó perdido, aproximadamente unos 300 kilómetros, descompensándose por el esfuerzo.
Un cachorro de lobo marino fue encontrado en la zona costera del balneario de Paysandú, en Uruguay, frente a Entre Ríos.
Tras el hallazgo de un joven que recorría la zona paseando a su perro, el animalito pasó a ser atendido por el veterinario Germán Matosas quien, con asesoría de expertos de la zona este del país oriental, hizo todo lo posible para garantizar su supervivencia.
“A eso de las dos de la tarde fui a pasear a mi perro Rottweiler a la playa, iba con mi abuela a tomarnos unos mates en la orilla, en eso vimos el animal y al parecerme extraño me acerqué a ver qué era. No parecía peligroso e intenté ver si estaba herido. No había mucha gente y no supe como llego allí, al ver que estaba bien lo regresé al agua y el animalito se subió nuevamente como a tomar sol, así que tomamos algunas fotos y lo dejamos tranquilo”, dijo Ezequiel Olivera.
Al difundirse la novedad, Matosas llevó una manta con la cual pudieron tomar al cachorro en brazos, evitándole mayores daños, y lo trasladaron a un lugar seguro.
Respecto al por qué de tan extraña aparición en esta zona del país, “se presume que nadó perdido a causa de la tormenta, aproximadamente unos 300 kilómetros, descompensándose por el esfuerzo”, según explicó a los rescatistas Ricardo Tesore, de SOS Rescate Fauna Marina.
Aseguran que “es la primera vez que hay registros de que un lobo marino, y cachorro, se encuentre tan distante de su hábitat”. El que había llegado más lejos hasta el momento había alcanzado las costas de Gualeguaychú.
Inmediatamente de ser retirado de la playa, el pequeño comenzó a ser tratado por Matosas, quien le brindó los primeros auxilios y desplegó una serie de medidas de reanimación -suero y medicamentos– de acuerdo con las indicaciones de Tesore, especialista en el tratamiento de lobos marinos en su refugio de Punta Colorada, Maldonado, desde hace más de 30 años. A dicho lugar pensaban trasladar al lobezno cuando se estabilizara y pudiera restablecerse para su posterior liberación.
Sin embargo, pese a todos los intentos médicos, el cachorro sufrió un shock -presentaba hipotermia al momento de su rescate- y falleció, causando una sensación de impotencia y congoja entre quienes intentaron con todos sus esfuerzos salvarle la vida, publica el diario El Telégrafo. A todo esto, varias personas se movilizaban, ya fuera buscando peces para alimentarlo y mediante contactos y llamadas procurando su traslado, así como autoridades de la Prefectura local, pero todos los intentos fueron en vano.