Estilo de bajada Ricardo Silva de Almeida fue condenado por el tribunal de nuestra ciudad. También hubo polémicas en el seno de los funcionarios judiciales.
El joven Ricardo Silva de Almeida (18), fue condenado en la jornada de ayer por el tribunal de la Sala de Audiencia de la Cámara de Apelaciones, a 22 años de prisión por el homicidio de Matías Farfán. El violento delincuente, que a pesar de su corta edad ya tenía una muerte en su haber, fue encontrado culpable de robo calificado en grado de tentativa, homicidio en ocasión de robo y un abuso de arma.
Tras la lectura de la sentencia, Almeida, fue trasladado a la Unidad Penal N° 1 de la ciudad de Paraná, donde purgará su condena. El tribunal integrado por Alberto Seró, Fabián López Moras y Rubén Chaia, decidieron aplicar una pena más acorde a lo solicitado por el fiscal Tomás Rojas, quien había pedido 25 años, en tanto que la Defensa, a cargo de Alejandrina Herrero pretendía la absolución por el beneficio de la duda.
Madrugada violenta
Según se pudo establecer, el crimen del adolescente se dio en la madrugada del 7 de abril, cuando el delincuente intentó robar la moto Yamaha GHI-876, en la que se desplazaba Matías Gonzalo Farfán (alias El Porteño) y su compañero Lucas Piñeyro. Al resistirse al ilícito, ambos motociclistas fueron baleados a corta distancia en 12 de Octubre y 12 del Oeste. La peor parte se la llevó Farfán quien recibió un tiro en la zona lumbar, que lo dejó malherido y finalmente el 18 de abril, le produjo la muerte. Vale destacar que segundos antes Almeida había baleado a otro motociclista, identificado como Justo Ramón Galante. Este último sufrió una herida en la pierna a pesar de lo cual logró escapar del lugar.
Dos crímenes, un asesino
Antes que Ricardo Silva de Almeida, disparara contra Farfán, ya era conocido por cometer un asesinato. Fue el 19 de agosto de 2012, cuando aún tenía 17 años. La víctima fue Leonardo Ogguier, a quien apuñaló en el interior del ex boliche bailable Estrella de la Noche. Por ese homicidio, el adolescente fue detenido y llevado ante un tribunal, que lo declaró responsable y dispuso que quede a disposición de la Justicia, teniendo que someterse a tratamiento por su adicción a las drogas.
Durante su internación, el adolescente tuvo problemas de conducta y convivencia con otros internos por lo que fue trasladado a la Comisaría de la Minoridad y Violencia Familiar de Concepción del Uruguay. El traslado llevó a que el defensor General de la provincia, Maximiliano Benítez, y el defensor de Pobres y Menores, Pablo Barbirotto, presentaron un habeas corpus para que fuera excarcelado.
Polémica en la Justicia
La liberación generó una fuerte polémica en el seno de la justicia de la provincia de Entre Ríos. Pero eso no fue todo, ya que a los pocos días de salir a la calle, y ya siendo mayor, Almeida mató a Farfán. En ese marco, el fiscal general de Concepción del Uruguay, Diego Young, llegó a decir que hay funcionarios judiciales «incompetentes» para ocupar cargos y que el nuevo homicidio «era previsible y estaba anunciado en los informes psiquiátricos que obran en la causa».
Con la condena de Almeida se cierra un nuevo capítulo en la lamentable historia de crímenes ocurridos en lo que va del 2013. Vale recordar que el otro hecho importante es el que tiene que ver con el asesinato de Diego Wetzel, que en las próximas horas tendrá resolución judicial al dictarse sentencia contra los acusados.