El propietario del campo afectado por las llamas sólo pudo salvar unos 10 cerdos. El fuego se habría iniciado por un cortocircuito en el sistema eléctrico de las mantas térmicas con que calefaccionan a los animales. En la noche del sábado, la ciudad de Crespo se alertó ante el intenso ulular de las sirenas de bomberos voluntarios, que
acudieron a sofocar un voraz incendio en un establecimiento de producción porcina de Aldea San Rafael. Al llegar al lugar, se encontraron con un galpón ardiendo en llamas, el cual se consumió completamente a los pocos minutos, en gran parte ayudado por el viento reinante, lo que motivó que se convocara a una dotación de Seguí. Esta decisión también se tomó en virtud de que a pocos metros se encuentra emplazado un tanque de gas a granel, indica El Observador. La escena desgarradora se centró en los gruñidos desesperados de cientos de cerdos, que se calcinaron vivos. Diego Kriger, propietario del campo, indicó que se murieron 35 cerdas y unos 400 lechoncitos, en tanto que sólo pudo salvar a no más de 10 cerdas, las cuales están bajo la observación veterinaria por las quemaduras sufridas.
En horas de la mañana del domingo, se hizo presente personal de Bomberos Zapadores de la Policía de Entre Ríos, para efectuar las pericias que permitirán determinar el origen del foco ígneo. Como primera hipótesis, la familia de Kriger supone que podría haberse debido a un cortocircuito en el sistema eléctrico de las mantas térmicas con que calefaccionan a los animales.