El fondista Osvaldo Suárez y Valerio Vallania -un múltiple atleta cordobés de la década del 20- son los atletas argentinos con mayor cantidad de títulos en estos Campeonatos, mientras que en los tiempos recientes sobresalen los nombres de Juan Ignacio Cerra y Germán Lauro.
Suárez logró 11 medallas de oro, 1 de plata y 1 de bronce entre 1956 y 1967. Ya había debutado con sólo 18 años en el Sudamericano de 1952, quedando sexto en los 1.500 llanos. Cuatro años después, en Santiago, logró el recordado triplete (5.000, 10.000 y medio maratón) que iba a repetir en Montevideo (1958). El último de sus títulos fue ante una multitud en Parque Chacabuco (1967) sobre 10 mil llanos, en memorable duelo con el colombiano Víctor Mora. Y siguió en el equipo nacional hasta Lima (1971). Vallania, por su parte, logró 11 medallas de oro y 2 de bronce entre 1922 y 1931 en pruebas que iban desde los 110 con vallas, salto en alto y largo hasta el decathlon.
Germán Lauro, quien se retiró hace pocas temporadas y ahora es el manager de nuestros equipos nacionales, totalizó 9 medallas de oro, 2 de plat ay 7 de bronce (18 en la suma) entre el 2006 y 2019 en pruebas de bala y disco.
Y también con 9 medallas de oro (además de 1 en plata y 1 en bronce) se marchó Juan Ignacio Cerra en lanzamiento del martillo. Sus nueve títulos consecutivos de martillo, entre 1997 y 2011, lo convierten en el máximo ganador de una misma prueba en el historial de los campeonatos.
El atleta argentino que logró más medallas (5) en un mismo Campeonato Sudamericano fue el fondista Domingo Amaison, en aquella recordada gesta de Rio de Janeiro (1965), donde ganó los 5.000 metros llanos y 3.000 con obstáculos, fue subcampeón de 10.000 y logró el bronce en 1.500… y maratón.
Tanto Valerio Vallania (1926) como Raúl Ibarra (1941) consiguieron cuatro medallas de oro en un mismo Campeonato. En el caso de Ibarra, lo hizo en la pista de Gimnasia y Esgrima, logrando los títulos de 3.000, 5.000, 10.000 y cross country.
En damas, la atleta argentina más exitosa fue nuestra subcampeona olímpica Noemí Simonetto, quien acumuló 11 medallas de oro, 3 de plata y 2 de bronce entre 1941 y 1947. Había debutado con quince años en esta competición. Y tanto en 1945 como en 1947 logró cinco medallas, en pruebas como 100 llanos, 80 con vallas, saltos en alto y largo, y relevos. En Rio de Janeiro (1947) fue campeona de 100, vallas, largo y 4×100. Ya estaba el antecedente de Lelia Spuhr, quien también había logrado cuatro títulos en 1941: 100, 200, alto y 4×100.
Detrás de Simonetto en el «medallero femenino» aparecen otras atletas históricas de nuestro país: la velocista Beatriz Eva Allocco y la lanzadora Ingeborg Mello. La popular «Betty», hoy radicada en Miami, logró 8 medallas de oro, 2 de plata y una de bronce entre 1971 y 1979, sobresaliendo sus dominios de las pruebas rápidas (100, 200 y relevos) en los Sudamericanos de Montevideo 77 y Bucaramanga 79. Mello, quien llegó muy joven desde su Alemania natal, representó al país casi hasta los 50 años y fue finalista olímpica. En los Sudamericanos logró 7 medallas de oro, 2 de plata y 4 de bronce (total de 13) entre 1941 y 1963. De los tiempos más recientes hay que mencionar los cuatro títulos consecutivos de Alejandra García en salto con garrocha (1995 a 2003), algo inigualado por otra argentina en cualquier especialidad.